El tópico y la retórica dicen que hay dos Españas. La realidad geopolítica, por su parte, dice que España de momento sólo hay una… Pero Azerbaiyanes hay dos.
Algo tiene Persia con el fuego, que le fascina. Su religión en la época aqueménida, el mazdeísmo o zoroastrismo, aún practicada en la actualidad, era conocida como ‘religión del fuego’ por la amplia presencia de éste en su mito y su rito. El fundador de ésta, quien proveyó a la dinastía aqueménida de una herramienta dúctil para vertebrar un Estado demasiado grande para ser controlado a base de impuestos, fue Zoroastro. También conocido como Zaratrustra, nació en una región cuyo nombre provenía de un sátrapa llamado Atropatene (‘fuego protector’); lo que hoy conocemos como Azerbaiyán… O, mejor dicho, Azerbaiyán Meridional.
Aunque nuestros mapamundis sólo reflejen uno, en realidad hay dos Azerbaiyanes. Incluso tres, si queremos hilar fino. Porque el Azerbayán Meridional, perteneciente a Irán, es divisible (y dividido, administrativamente hablando) en Azerbaiyán Oriental y Azerbaiyán Occidental. El Azerbaiyán famoso, el de los mapamundis, es el ex soviético y europeo. Es un trozo del territorio original, algo menor en superficie que el Meridional y llamado Arran en la antigüedad. Fue entregado por sus propietarios originales iraníes a Rusia hace un par de siglos para firmar la paz tras una contienda; se integró en la URSS durante su vigencia y, disuelta esta, se convirtió en un país independiente con una república autónoma en su interior.
Llegados a este punto os preguntaréis a qué vienen todas estas historias. Hay un motivo, muy sencillo y comprensible mirando el calendario UCI. Igual que existen dos Azerbaiyanes, hay también dos Vueltas a Azerbaiyán. Y las dos se disputan esta semana.
Heydar Aliyev Cycling Tour
Prácticamente inactiva durante 20 años, la federación de ciclismo de Azerbaiyán recibió un impulso el año pasado cuando fue elegido presidente Fazil Mammadov. No es un hombre cualquiera, por cuanto no sólo preside el ciclismo; también el hockey hielo. Y la lucha libre. Y es Ministro de Impuestos. Ya se sabe: en los países orientales mandan pocos, pero mandan. Probablemente espoleado por la creciente ola de afición por el ciclismo de competición nacida entre los oligarcas del Este de Europa, o por la amistad del gobierno de Azerbaiyán con Pat McQuaid y la Itera de Igor Makarov a través de la empresa energética pública azerbaiyana Socar, algunos negocios conjuntos en Georgia y otras sinergias con el oscuro gasoducto Nabucco, Mammadov decidió contratar como director técnico a Theo Maucher, ex director de Cervélo, el Garmin femenino y Gerolsteiner, donde coincidió con el actual mánager de Katusha, Hans-Michel Holczer.
Sea como fuere, Maucher ha puesto en marcha un plan para revitalizar el ciclismo en la república presidencialista ex soviética, considerada autoritaria con un índice de democracia de 3,1 sobre 10 según la revista The Economist. «Ahora mismo hay pocos clubes ciclistas, pero estamos progresando buscando reavivar el interés por el ciclismo. Si logramos orientar a los jóvenes deportistas azerbaiyanos estoy seguro de que conseguirán buenos resultados en el futuro«. El presente, de momento, es escaso. Sólo cuatro ciclistas del país están registrados en la UCI, todos con en el conjunto alemán Specialized Concept Store, regido por Hartmut Taümler, antiguo entrenador de Stefan Schumacher, y Karl Link, presidente de honor de la asociación de clubes ciclistas alemanes WRSV, clave en la incorporación de la parte azerbaiyana del proyecto y amigo personal de Holczer.
Specialized Concept Store estará, por supuesto, en la línea de salida de la joya de la corona del proyecto de Maucher: el Heydar Aliyev Anniversary Cycling Tour, ronda de categoría 2.2U celebrada en estas fechas no por asuntos de contraprogramación sino para conmemorar el nacimiento de Heydar Aliyev. Éste es un fallecido ex presidente de Azerbaiyán, padre del actual máximo mandatario de la nación Ilham Aliyev y compañero de negocios de Igor Makarov, con quien mantuvo una relación plagada de altibajos que incluso dejaron sin suministro gasero al país en alguna ocasión.
La carrera consta de cinco días de competición (desde hoy día 9 hasta el domingo día 13), con versión femenina y masculina. Tiene una completísima web y actividad en redes sociales y contará con presencia española mediante el Diputación de Ávila – Smilekers, la escuadra amateur apadrinada por Carlos Sastre, que correrá merced a la amistad de Theo Maucher con Álex Sans, quien a su vez se puso en contacto con el propio Sastre para ofrecer a su escuadra la posibilidad de participar en esta carrera.
Azarbaijan International Cycling Tour
Algo más amable es la Vuelta al Azerbaiyán iraní, o meridional. Al contrario que su prima azarí, parece independiente de oligarquías extrañas y tiene mucha más tradición, puesto que la 2012 será su 27ª edición. Aprovechará las particularidades de la región, con acceso a los Montes Elburz por el este y a los temibles Montes Zagros en el oeste, para ofrecer a los corredores altimetrías tan alucinantes como ésta, un final en alto a 3000 metros de altitud.
La prueba se disputa por los alrededores de Tabriz, capital económica de Irán por su producción de hidrocarburos y cuya principal empresa, Tabriz Petrochimical, sufraga el equipo del cual emergió Mehdi Sohrabi. Uno de sus puntos culminantes, por exotismo, será el trayecto de quince kilómetros sobre el Lago Urmía que se afrontarán en la primera etapa. Se trata del tercer lago de agua salada más grande del mundo por superficie, si bien su volumen es escaso por cuanto apenas alcanza los 16 metros de profundidad. 35 presas y una grave sequía le amenazan: más de un cuarto de su superficie es ahora un desierto de sal. Los corredores pedalearán sobre él gracias a un puente inaugurado por el alto dirigente iraní Mahmud Ahmadineyad el 17 de noviembre de 2008. Esta construcción, sin embargo, tiene un gran problema para sobrevivir: según algunos conocedores, la altísima salinidad del lago (cuatro veces mayor que la del mar) lo degradará muy pronto.
La participación de la carrera será variopinta y llamativa, casi tanto como su elenco de patrocinadores. La representación extranjera, dispuesta a lograr un nuevo triunfo foráneo (van siete; el último lo marcó Alexey Kolessov en 2004), la encabezan el Konya Torku de Gabrovski, el ucraniano ISD-Lampre, el paraguayo Start Cycling Team y Specialized Concept Store. Como representación local están el obvio y tiránico Tabriz, ganador de cinco de las seis últimas ediciones de la carrera; Mes Kerman, cuyo maillot clónico de Rabobank representa a un equipo de fútbol irrelevante de la primera división iraní cuya propiedad corresponde a una empresa del cobre; y el Azad University de Amir Zargari, que lleva dos de los representantes españoles en esta carrera, Óscar Pujol y Vidal Celis.
No serán los únicos nacionales en esta Vuelta al Azerbaiyán iraní: también estará Andalucía, el único conjunto de categoría Profesional invitado a la prueba. «Hace cuatro años teníamos que ir tocando puertas para encontrar calendario, pero ahora son los organizadores quienes nos llaman a nosotros gracias a nuestro estatus de equipo combativo«, responde orgulloso su director Antonio Cabello cuando se le pregunta por las razones de la participación en la prueba. «Esta es una carrera en crecimiento, como hace unos pocos años lo era San Luis o Turquía. La UCI está apostando fuerte por ella«, asevera; «nosotros no conocemos el terreno, pero llevamos un buen bloque con Ramírez Abeja de líder para luchar por conseguir una victoria«. Eso sí: ni los andaluces ni Pujol ni Celis podrán tener el honor de inaugurar el casillero español en esta carrera. Éste correspondió a Rafa Serrano, quien defendiendo los colores de Heraklion Kastro – Murcia se llevó la cuarta etapa de la edición de 2010.
… Y por historias como ésta de los dos Azerbaiyanes mola tanto el ciclismo.
Felicidades, de «chapeau» este articulo.
Me gustaMe gusta