El pasado lunes, preguntado por el Tour de Flandes, el suizo Fabian Cancellara se descargaba de responsabilidad e iniciaba la tradicional guerra psicológica previa a cualquier gran carrera: «La presión que yo tenía el año pasado corresponde ahora a Tom Boonen«. Y explicaba. «Después de este fin de semana, con sus victorias en GP E3 Harelbeke y Gante – Wevelgem, él tiene cinco estrellas en la lista de favoritos«. E incluso se permitía el lujo de citar una conversación con el hombre cuyo rendimiento previsto en De Ronde parece más próximo a la decepción: «He hablado con Philippe Gilbert y sabemos que, estén al 90 o al 100%, los hombres a batir son los mismos: Omega Pharma – Quick Step».
No yerra ‘Espartaco’ adjudicándole presión, responsabilidad y vitola de favoritismo a la escuadra belga y su líder. Tom Boonen, ganador en dos ocasiones del Tour de Flandes, no rehuyó en la rueda de prensa de OPQS su rol de candidato número uno a la victoria, pero avisa de que la pelota no está en su tejado. «Yo no estoy obligado a descolgar a nadie, tengo confianza en mi esprint y puedo recurrir también a mi equipo«. Ahí están sus dos grandes puntos fuertes, quizá los diferenciales respecto de Cancellara. Los coequipiers del suizo en RadioShack-Nissan (Bennati, Gallopin, Popovych) resultan sensiblemente inferiores al tremendo bloque de OPQS (Chavanel, Terpstra, Steegmans). En cuanto a la punta de velocidad, el propio Boonen se explica: «Quizá él [Cancellara] tenga un motor un poco más grande… Pero yo soy más rápido«.
Siguiendo con los órdagos, ‘Tommeke’ afirmó no tener por qué vigilar especialmente al campeón suizo: «Yo sólo corro para batirme a mí mismo«. Y ponía los nombres de otros dos candidatos sobre la mesa: «Espero mucho de Filippo Pozzato y Peter Sagan«. Sobre el talento eslovaco del Liquigas, Boonen apuntaba que «estará en el podio en los próximos tres o cuatro años; quizá pueda llegar lejos este mismo domingo«. Citaba incluso a su coequipier y reciente ganador de los Tres Días de la Panne Sylvain Chavanel: «Es uno de los mayores favoritos, por cuanto llega en buena forma y el trazado es bastante duro, acorde con sus características«. No concedía tantas opciones, sin embargo, a Edvald Boasson Hagen: «Si se llega al esprint habrá que vigilarle, pero no lo considero un favorito«.
No cabe duda: tanto Tom Boonen como su OPQS llegan muy crecidos a este Tour de Flandes. Apenas concluido marzo, el individuo lleva siete victorias y el colectivo 23. Una cifra poderosa, sobre todo comparada con la pareja de triunfos que ostenta su máximo rival Fabian Cancellara, que suponen también los dos únicos laureles en el haber de su RadioShack. Quizá sea por esta circunstancia que los belgas llegan con toda la expectación sobre sus espaldas, como rivales a batir para unos contrincantes que no tienen prácticamente nada que perder ante la inmensa superioridad belga.
Foto ©: Omega Pharma – Quick Step