As the Toto turns…

Hoy se inauguró la temporada europea y, en contra de lo que dictan la nomeclatura y la tradición, no lo hizo en el GP Apertura de la Marsellesa francés sino en suelo italiano. Fue concretamente en el Giro de la Provincia de Reggio Calabria, semiclásica disputada tradicionalmente en marzo que tras un paréntesis de varios años ha cambiado de fecha (este último fin de semana de enero) y de formato (ahora es una vuelta de cuatro etapas) para rentabilizar el interés de los equipos por competir lo antes posible. Las atracciones en el día de hoy eran tres: la simpática, la escabrosa y la deportiva. Ninguna de ellas defraudó.

La simpática era ver de nuevo sobre la bicicleta a un ilustre como Andrea Noe’, que volvía con los colores de Ceramica Flaminia tras su retirada en el Giro del Trentino del año pasado. ¿Resultado? No se sabe, no hay clasificaciones oficiales; no parece haber habido mayor novedad. La atención ha sido mayor para el hombre que encabeza el artículo, el polémico Salvatore ‘Toto’ Comesso. La figura del carismático velocista trasciende fronteras; no en vano, en torno a él se articula la tira cómica de la bizarra página estadounidense NYVeloCity. Comesso renunció al máximo nivel precisamente desde que cruzó la frontera italiana, firmando primero por el luxemburgués Preti Manigmi y luego por el estonio Meridiana – Kalev Chocolate, donde aún milita. Prosigue su carrera, cada vez con un calendario más reducido, pero con una fama igual de amplia. Cada vez que compite en el país con forma de bota se lleva todos los focos…

Aunque hoy los tuvo que compartir, no solo con su quinto Noe’, sino también con un coequipier de éste, Enrico Rossi. La atracción escabrosa del día. Cuñado de Riccardo Ricco’ y con ello integrante de un clan muy particular cuya serie de despropósitos vivía un último y esperpéntico capítulo esta semana con el positivo de Vania Rossi, hermana de Enrico y compañera sentimental de Riccardo. El segundo positivo por EPO-CERA de la familia. Ver a Enrico hoy sobre la bicicleta era constatar que el asunto no era un folletín, ficticio por definición, sino una historia tan real como esquizofrénica.

El tercer punto de interés, el deportivo, fue quizá el más productivo. Se vivió un buen espectáculo en la primera etapa de la ronda calabresa. En principio, la carrera respondió al esquema habitual en el ciclismo de la década pasada: fuga lejana, control del pelotón, neutralización por parte de los equipos con sprinters, encabezados hoy por el Lampre de Allessandro Petacchi. Sin embargo, los kilómetros finales siguieron un nuevo esquema, el que esperamos corresponda a este decenio: ataques, uno sobre otro, con presencia de corredores de peso como Giovanni Visconti (ISD).

Aprovechando precisamente el impulso del demarraje de Visconti en un puerto cercano a meta, el joven Filippo Savini (Colnago-CSF) lanzó su ataque y alcanzó unos pocos segundos de ventaja. El único hombre capaz de limar esa diferencia fue otro joven ‘romagnolo’, el ex pistard Matteo Montaguti (DeRosa), que aguantó a Savini en lo que restaba de ascenso e hizo valer sus condiciones de velocista en la recta de meta. Tras ellos llegó encabezando el pelotón el cántabro Fran Ventoso (Carmiooro), que parece haber encontrado en Italia terreno abonado para rentabilizar sus cualidades. Buen inicio de año, pues, para dos proyectos recién reinventados como Colnago (ex Panaria) y DeRosa (ex LPR).

El análisis conjunto de las tres atracciones de hoy nos da una idea de cómo vivimos los aficionados al ciclismo la temporada mientras llegan las grandes citas: pendientes de las viejas glorias y de las jóvenes promesas. Y del dopaje, claro. Del dichoso dopaje…

Foto: Cyclingnews
Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s