La Clásica de Almería sí se disputará en 2012

A pesar de los malos presagios levantados en el día de ayer, finalmente la Clásica de Almería sí se disputará en 2012 merced a un acuerdo suscrito esta mañana entre la Diputación de Almería y el organizador de la carrera, José Manuel Muñoz. Éste se muestra “agradecido” por “el paso al frente que ha dado el presidente de la corporación, Gabriel Amat, para salvar la mejor prueba ciclista de la provincia”.
La fórmula que permitirá que la Clásica de Almería tenga lugar el próximo domingo 26 de febrero ha sido un adelanto del pago de la suma comprometida como patrocinio para esta campaña. “El patrocinio de 2011”, explica Muñoz, “ni siquiera está en trámite por omisión de los anteriores gestores de la Diputación”. De esta manera, la entidad organizadora Alcide saca adelante una carrera que cuenta con un sólido respaldo privado y de las instituciones almerienses, pero nula aportación por parte de la Junta de Andalucía.
Respecto de los detalles de cómo será la competición de 2012, Muñoz afirma que “aún no están cerrados ni recorrido ni participación, pero esperamos tenerlos confirmados bastante pronto. De momento es seguro que la Clásica terminará en Almería [tradicional esprint] y su trazado discurrirá por el Levante (zona este) de la provincia; la población que acogerá la salida intentaremos concretarla mañana”.
Respecto de la participación, Muñoz anuncia a “Garmin, Lotto, Rabobank y Project 1t4i; Movistar, Euskaltel, Caja Rural y Andalucía también estarán, en principio, presentes. Con el resto de escuadras, de momento, sólo estamos negociando”. Preguntado por la participación de los equipos continentales españoles, comenta que “probablemente acojamos a Orbea y Burgos BH: sólo son dos y hay que intentar ayudarles a tener un buen calendario”. Respecto de Gios-Deyser, “es imposible tenerle en la carrera por normativa, ya que está registrado en Grecia y una competición de categoría .HC no puede invitar continentales extranjeros”.

Información anterior: La Clásica de Almería 2012, en peligro

La edición 2012 de la Clásica de Almería, fechada para el próximo domingo 26 de febrero, podría no disputarse. El motivo, según ha confirmado en declaraciones telefónicas el organizador de la prueba José Manuel Muñoz, son los 30.000 € que distintas instituciones públicas adeudan a Alcide, entidad gestora de la prueba andaluza de nivel .HC. “No es un problema de aportación del sector privado”, sostiene Muñoz, “sino de inferencia del público”.
La parte del león de la deuda correspondería a la Diputación de Almería, que aún no habría liquidado la suma comprometida para patrocinar la Clásica la pasada temporada. “Este año hubo cambio de corporación”, explica Muñoz. “La anterior dejó nuestra cuenta pendiente y la nueva aún no la ha hecho efectiva. Sin embargo, no se puede decir que la disponibilidad de los actuales gestores de la Diputación haya sido mala; de hecho, el viernes tendremos una reunión para explorar posibles salidas a esta situación. En cambio, sí se puede decir que ha llegado un tanto a destiempo…”. Respecto del resto de la deuda, corresponde a “distintos ayuntamientos que tampoco han pagado facturas de ediciones anteriores”.
Del resultado del encuentro del viernes entre miembros de la Diputación de Almería y de la organización de la Clásica de Almería dependerá, por tanto, la celebración o no de la carrera. De no llegar ésta a disputarse, los problemas crecerían para Muñoz: según cuenta, tiene “contratos firmados a mi nombre con todos los equipos que participarían. Si no puedo hacerlos efectivos porque la Clásica no tenga lugar, me vería obligado a responder de ellos ante las escuadras que decidieran reclamarlos”.
Anuncio publicitario

Dos espónsors se separan; en medio, Philippe Gilbert

Tras entrar en la historia la semana pasada gracias a los triunfos de Philippe Gilbert en las tres Clásicas de las Árdenas, la escuadra Omega Pharma – Lotto ha firmado estos días su acta de defunción al ser confirmados oficialmente los rumores que apuntaban a un divorcio entre los dos espónsor de la formación belga. Divergencias de planes, criterios y prioridades han precipitado esta solución, a consumar este invierno. Aún sin tomar partido por ninguna de las dos partes y deseado por ambas se encuentra el astro valón Philippe Gilbert.
Oficialmente, los motivos de la separación de los caminos de Omega Pharma y Lotto se podrían resumir en lo siguiente: la farmacéutica ambiciona patrocinar un equipo de vocación mundial, mientras la marca de loterías públicas belga prefiere un proyecto orientado también a competiciones internacionales pero basado en corredores nacionales. Escarbando un poco más en esto podemos elucubrar un movimiento más político que deportivo.
Lotto podría crear un nuevo equipo ‘nacional’
Tal y como reporta el excelente blog The Inner Ring, el responsable institucional de Lotto Didier Reynders es un auténtico pesado que incluso desempeña actualmente el cargo de Ministro de Economía en una Bélgica sin Gobierno definido después de que los partidos políticas no hayan alcanzado en casi un año acuerdo para formarlo. Reynders, valón y aficionado al ciclismo, ve suculentos réditos para su imagen en asociarse mediante un patrocinio a una escuadra eminentemente belga y con Gilbert, verdadero ídolo de masas del país centroeuropeo junto a Tom Boonen, como estandarte y líder absoluto.
Es por ello que Lotto ha decidido iniciar movimientos para construir una nueva estructura en torno al astro valón y con corredores cercanos a éste como Bjorn Lëukemans (Vacansoleil) en plantilla. Hubo informaciones que indicaron una posible incorporación de Lotto a la escuadra FDJ; sin embargo, este proyecto ha sido desmentido y resultaría muy complicado de llevar a cabo, por cuanto la estructura francesa tiene contrato en vigor con la mayoría de los ciclistas con que cuenta en este momento en plantilla y estos son en su mayoría franceses, lo cual no casaría con los intereses de Lotto. Más plausible y probable según indica Cyclisme Revue es la creación de una nueva formación belga con el patrocinio mayoritario de Lotto y el apoyo del ente semipúblico de telecomunicaciones Belgacom y la empresa de trabajo temporal Adecco, que ya patrocinara junto a la propia marca Lotto un equipo ciclista a principios de siglo.
Omega Pharma necesitará un copatrocinador
La otra empresa envuelta en el patrocinio del actual equipo de Gilbert encara una situación algo más complicada. Omega Pharma es la titular de la estructura, lo cual implica tres posesiones principales: todos los materiales logísticos, la licencia World Tour y los contratos de todos los auxiliares y ciclistas del equipo. Lo primero reduce la inversión a afrontar para sacar la escuadra a las carreteras el próximo año. Lo segundo es una condición en principio buena pero puede resultar inane, por cuanto los ProTeam de 2012 se decidirán en teoría, como en 2011, en base a un ránking de mérito deportivo establecido por la UCI. Lo tercero supone un arma de doble filo, por cuanto según ha admitido el patrón de Omega Pharma Mark Coucke hay un total de 19 ciclistas con contrato en vigor. Ello asegura la permanencia en el equipo de cracks como Jurgen Van der Broeck o Andre Greipel; y, por otra parte, limita el margen de maniobra para incorporar a ciclistas acordes con los intereses de un hipotético nuevo patrocinador…
Por ello, la empresa que se una a Omega Pharma en la financiación de la estructura deberá tener una perspectiva muy similar a la farmacéutica: interés por el mercado belga, pero también por proyectarse a nivel mundial. Los rumores en torno al posible compañero de viaje de Omega Pharma apuntaron en un inicio a Quick Step, con quien fusionaría estructura. Sin embargo, no parece probable que dichos rumores se materialicen por cuanto el equipo de Patrick Lefévre recibió recientemente una inversión por parte del millonario checo Zdenek Bakala, interesando por catapultar a su compatriota Zdenek Stybar a la élite del ciclismo en carretera después de triunfar en el ciclocross. El trato ya ha sido negado por el propio Lefévre. Por otra parte, el diario belga Het Nieuwsblad ha asociado otras dos empresas con la formación poseída por Mark Coucke: Saxo Bank, actual patrocinador de la escuadra de Alberto Contador, y Telenet, empresa de telecomunicaciones belga que esponsorizó hasta este año el equipo de ciclocross del citado Stybar.
Y en medio, Gilbert
Tras su impresionante semana en las Árdenas, Gilbert ha visto como su cotización ha subido vertiginosamente y, además, sus dos espónsor litigan por tenerle en sus filas en 2012. Omega Pharma ya ha declarado “tener una opción sobre él”; Lotto, por su parte, parece decidida a echar el resto por su fichaje, dado que la escuadra sólo tiene sentido con él en plantilla. No es, sin embargo, la única ‘novia’ de Gilbert en estos días: también Astaná mostró interés por un hipotético fichaje a través de su alma máter Alexandre Vinokorov, compañero de entrenamientos en Mónaco del crack valón. Aunque este posible movimiento ya fue desmentido por Gilbert a principios de marzo, no puede aún descartarse del todo.
Lo único claro es que Gilbert buscará firmar durante el próximo mercado de fichajes un contrato suculento y, sobre todo, largo. Su mánager, Vincent Whathelet, ya habla de buscar un acuerdo “por cuatro años” que le permita rentabilizar el hito de ganar las tres Clásicas de las Árdenas. Gilbert, a quien actualmente se le estima un sueldo de 1’2 millones de euros al año, podría situarse como el mejor pagado del ciclismo mundial la próxima temporada.

Contador: un año… ¿y ahora qué?

El prestigioso periodista Carlos Arribas ha confirmado hoy en la versión digital del diario El País los rumores apuntados en días precedentes por AS: la Real Federación Española de Ciclismo (RFEC) ha decidido sancionar con un año sin competir al ciclista Alberto Contador por su positivo por clembuterol en un control realizado el pasado 21 de julio, en el día de descanso del Tour de Francia donde triunfó por delante del luxemburgués Andy Schleck.
Este dictamen no es, sin embargo, definitivo ni oficial. Por lo pronto, Contador tiene diez días hábiles para alegar contra esta decisión del Comite de Competición de la RFEC; una vez pasado este tiempo, el 9 de febrero, la Federación podrá tramitar la sanción y comunicarla al corredor, la Unión Ciclista Internacional (UCI) y la Agencia Mundial Antidopaje (AMA). En ese momento, las tres partes podrán hacer pública la sentencia y mostrarse conformes con ella… o enzarzarse en una nueva batalla legal en instancias superiores.
Esto último es lo más probable. La sanción de un año supone un punto intermedio entre los dos años exigidos por la AMA y en menor medida por la UCI (el máximo marcado por la legislación vigente) y la absolución total solicitada por Contador: no contenta a ninguno de los implicados.
Ambas partes exponen argumentos impepinables. El ciclista piensa, con razón, que la sustancia llegó a su cuerpo de una manera completamente incontrolada y que, en cualquier caso, no redundó en su condición física. Los estamentos, por su parte, dejan claro que la legislación hace caso omiso de voluntariedad y arbitrio: si hay clembuterol en el cuerpo del deportista hay sanción, sin importar el cuánto y el cómo.
En estos momentos, el desarrollo del caso parece apuntar a una resolución en el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) una vez la RFEC ratifique la sanción y la UCI haga lo propio dentro de un cierto lapso de tiempo. La fecha exacta es, por desgracia, una incógnita; sin embargo, no parece probable que la UCI oficialice su juicio más tarde de finales de febrero. En caso de seguir sin existir un acuerdo entre las partes, la siguiente instancia para recurrir sería el citado TAS, en el cual el proceso podría resolverse en los apenas quince días que duró el recurso de Johan Bruyneel solicitando una conmutación de su sanción por cambiar la ropa del equipo RadioShack improcedentemente en la última etapa del Tour de Francia… o dilatarse hasta los casi cinco meses que se tomó el tribunal suizo para decidir sobre el caso Valverde.
El veredicto definitivo del ‘caso Contador’ podría, pues, conocerse a mediados de marzo… o a principios de julio, en pleno Tour de Francia 2011.
Una vez en el TAS, las partes expondrán sus argumentos ante un grupo de tres expertos que, en teoría, atenderán a la legislación desde la perspectiva de la lógica deportiva. Ésa es la esperanza de Contador, confiado en que los jueces suizos valoren el origen azaroso del clembuterol en su sangre y el nulo efecto que tuvo sobre su condición física. Para defender su teoría ha contratado a expertos con cierto bagaje en estos temas, como el abogado Andy Ramos o el científico holandés Douwe de Boer, quien ya consiguiera que el vasco Aketza Peña saliera indemne de un positivo por nandrolona.
Los precedentes a tomar en cuenta para valorar el ‘caso Contador’ son, básicamente, cuatro. La jurisprudencia más interesante para el madrileño la sienta el tenista Richard Gasquet, positivo por cocaína que fuera absuelto bajo alegaciones de que la cocaína llegó a su cuerpo a través de un beso recibido en una discoteca. Igualmente favorable para los intereses del corredor de Saxo Bank era el caso del jugador de tenis de mesa alemán Dimitri Ovtcharov, también positivo por clembuterol y absuelto por su Federación… hasta que esta decisión fue recurrida por la AMA al TAS. Este caso lleva pendiente de resolución desde diciembre del año pasado.
Los casos acaecidos en el deporte de la bicicleta son mucho menos halagüeños para Contador. Alessandro Colo’, corredor italiano del ISD, fue también controlado positivo por clembuterol en la Vuelta a México y, tras muchas alegaciones, consiguió que su sanción fuera reducida a un año. El chino de RadioShack Fuyu Li no tuvo tanta suerte y recibió inmediatamente dos temporadas de sanción; sin embargo, ya se ha anunciado que también recurrirá su sanción en caso de prosperar los recursos de Contador.
En caso de recibir la sanción de un año que rige actualmente, Alberto Contador se vería obligado a entregar a la UCI el 70% de su salario de 2010 en virtud de los acuerdos antidopaje vigentes y perdería, además, la victoria en el Tour de Francia del año pasado. Su vuelta a las competiciones sería otra incógnita a resolver, ya que ese año podría empezar a contar desde el día en el cual se confirme la sanción; desde el día en el cual tuvo lugar el positivo (21 de julio), lo cual le permitiría participar en la próxima Vuelta a España (cuyo inicio está fechado para el 20 de agosto)… o desde el día en el cual le fue comunicado el resultado de dicho control (24 de agosto), un plazo que le impediría tomar parte en la citada Vuelta por un margen de apenas cuatro días.
Sólo cabe esperar, por el bien de todos los implicados, del ciclismo y de su imagen, que el resultado de todas estas pesquisas llegue lo antes posible.

Geox se queda fuera del Tour de Francia 2011

La empresa ASO ha anunciado hoy la nómina de escuadras participantes en la próxima edición del Tour de Francia. En ella figuran, como es preceptivo por la actual normativa mundial del ciclismo, los dieciocho equipos ProTeam (de Primera División); junto a ellos, cuatro invitados: los franceses Cofidis, FDJ, Europcar y Saur-Sojasun. Un plantel en el cual brilla por su ausencia el conjunto de Denis Menchov y Carlos Sastre, Geox-TMC, que tampoco estará en París-Niza y Tirreno-Adriático, primeras citas importantes de la temporada ciclista.
La concesión por parte de ASO de sus cuatro ‘wild card’ a formaciones francesas es lógica y poco discutible si obviamos que llevaba implícito dejar fuera de la carrera a Geox. Cofidis es una estructura potente y combativa que pone salsa allá donde participa. FDJ acumula en su plantilla a importantes ciclistas franceses como Fédrigo o Casar a quienes no hubiera sido lógico dejar fuera. Europcar tiene cierto valor deportivo y está radicado en la región de Vendée, en la cual será la Grand Départ de la ronda francesa este 2011. Y Saur-Sojasun, por su parte, tiene un buen grupo de corredores (con la gran promesa gala Jérôme Coppel a la cabeza) y lleva años haciendo méritos ante ASO, que había contraído ya una deuda moral ante la escuadra y su patrocinador.
No cabe duda de que los cuatro equipos invitados han hecho méritos para estar en la salida del Tour de Francia 2011. El problema es la existencia de un quinto, con un valor deportivo quizá superior y damnificado por el reparto. El equipo Geox-TMC, antiguo Footon-Servetto, presenta este año un potencial muy superior al de temporadas anteriores gracias a incorporaciones de la calidad de Denis Menchov (tercero en el pasado Tour) ó Carlos Sastre (ganador de la ronda francesa en 2008). Con esos dos ciclistas como capitanes y un buen bloque tras ellos con ciclistas contrastados como Juanjo Cobo, David De la Fuente o David Blanco, y jóvenes como Rafa Valls, Fabio Duarte o Fabio Felline, Geox podría presentar un ‘nueve’ capaz de ser protagonista en cualquier prueba por etapas.
Las controversias (y consecuencias) de la no invitación de Geox
“No creo que haya más de cinco equipos en el mundo capaces de presentar un mejor bloque para una gran vuelta”, afirma Joxean Fernández ‘Matxin’, director de Geox, en declaraciones a Arueda.com. “No se ha valorado lo suficiente la calidad deportiva del equipo. Han mandado más otras cuestiones”. Preguntado por si siente que la escuadra está siendo perseguida por las altas instancias del ciclismo, el técnico vizcaíno contesta: “No. Simplemente no está siendo valorado como merece. Con esto, se está faltando al respeto a los corredores que forman parte de este proyecto”.
Los corredores. Otros damnificados. La reacción de los líderes del equipo no se ha hecho esperar. Carlos Sastre, a través de su servicio de prensa y Cyclingnews.com, ha declarado: “después de diez años en los que he podido asistir a la ronda gala, el no poder hacerlo en este 2011 es un palo. Es la decisión de ASO y no podemos hacer nada ante esto. Hay otras carreras: estaremos en el Giro, y también en la Vuelta”. Por su parte, Menchov ha sido “el primero en llamar” a Matxin para redefinir su calendario: a partir de ahora, no habrá otro horizonte para el ruso que la ‘corsa rosa’, el próximo 7 de mayo, en Turín.
Otra cara de la no invitación de Geox al próximo Tour es los rumores desatados en torno a la escuadra, cuyo turbulento invierno ha sido una constante fuente de noticias. Se apuntaba en los mentideros a una posible espantá de corredores y espónsors. Sastre sesgaba de cuajo los rumores en torno a su persona (“No tengo ninguna razón para dejar mi equipo”), mientras Matxin negaba cualquier asomo de intención por parte de Menchov de dejar el equipo. ¿Y los patrocinadores? “Acabo de salir de una reunión con todos ellos para acabar de definir el nuevo maillot”, revela el director vizcaíno. Se filtró que, sin Tour, Geox quizá retirara su apoyo a la escuadra. “A lo mejor fue un método de presión. No es lo que nos han transmitido en ningún momento a los miembros del equipo”.
La no inclusión en el plantel del Tour no ha sido la única noticia mala recibida hoy por Geox. La escuadra tampoco ha sido invitada a participar en París-Niza (también organizada por ASO) ni en Tirreno-Adriático (de RCS, empresa reponsable del Giro). Respecto a esta última carrera, Matxin comenta: “No creo que faltemos en la línea de salida. Sólo se han anunciado veinte escuadras; faltan dos plazas y espero que una sea para nosotros. Eso sí: habrá que esperar”.
En cualquier caso, el de hoy ha sido un día negro para Geox; un equipo que vive a trompicones, en una montaña rusa, desde aquel aciago día de julio en el cual Riccardo Ricco’ dio positivo. Un Ricco’ que, por cierto, sí estará presente en el Tour de Francia en las filas del conjunto Vacansoleil.

Is Danilo Di Luca’s signing illegal?

This morning, Italian newspaper La Gazzeta dello Sport came with the news of the day for the world of cycling: Danilo Di Luca is set to join Katusha Team for the upcoming 2011 season. The only condition imposed by Andrei Tchmil, manager of the Russian squad, was that the cyclist from Spoltore had to ride at zero cost, receiving only bonuses for the accomplishment of certain objectives…
The background of this movement is, at least, doubtful. Leaving off sportive considerations such as what can Di Luca offer to Katusha given the facts that he is 34 years old and hasn’t took part in any competition for two years; leaving off ethical issues of signing a rider who has had several links with doping… The truth is that the movement is almost completely wrong legally. Although Di Luca has already finished his two-years ban and is free to sign with any team (in fact Astaná has been tempting him for months), he can’t go to Katusha and, in theory, he can’t ride without perceiving a minimum salary…
Ride without remuneration? Not possible in principle…
Provision number 10 on the Joint Agreements agreed by International Association of Professional Cycling Group (AIGCP) and Associated Professional Riders (CPA), in force to rule the contracts between riders and squads, establish a minimum wage of 33.000 € per year (increased to 50.000 € por ProTeam riders according to UCI regulations) for any profesional cyclist not ‘new profesional’. It can be added to this amount certains bonuses agreed by rider and team. This provision makes illegal Di Luca’s signing “at zero cost”…
But there is a clause in the Joint Agreements which makes posible to avoid this obstacle. In case of agreement between cyclist and squad to “break” the rule, the UCI ProTour Council can establish exemptions “in interest of sport”. In fact, Danilo Di Luca’s is not the first time in professional cycling when a rider doesn’t perceive any salary: oficially, neither did Jorg Jacksche nor Lance Armstrong in Cinelli and Astaná in 2008 and 2009, respectively. And no word about the cyclist who doesn’t receive any euro of those they had signed…
With Di Luca, Katusha’s roster would be out of the law
The true problem for Di Luca’s signing with Katusha comes because, if the Italian joins, the composition of Russian team’s roster would be illegal as It was according to its movements in the cycling market. Successive news this winter said that the squad had in its rangs 30 cyclist and only one new professional (Egor Silin), when UCI establishes on its 2.15.110 regulation a minimum of two and a maximum of five for those teams who reach the 30 signed riders. For the UCI, a new professional is a cyclist who joins a UCI ProTeam or Professional Continental Team for the first time no later than during his twenty-second year; the status of ‘neo’ lasts till the end of the second year as pro of the rider.
The effective of Katusha lowed to 29 cyclist when Artem Ovechkin was “cutted” before first training camp of the team in Calpe (Spain). Taken in account the movement, roster became legal again, and only able to be extended with a rider of 22 years or less and no professional expirience. The signing of Di Luca is illegal from that sight. But Tchmil hasn’t said the last word about this issue. Nowadays there are only 26 riders registrated on the UCI by Katusha, remaining to be registered amongst those with a reported contract Arkimedes Arguelyes, Joaquín Rodríguez and the ‘neo’ Egor Silin. The Russian squad can add Silin officially to its rangs, even another new professional; but only two riders of the shortlist of Arguelyes, Rodríguez and Di Luca…
If he avoids this legal problems, Danilo Di Luca would be able to return to first level of cycling in Katusha Team. His calendar would be composed by, amongst others races, Tirreno-Adriático, Milano-San Remo, the Ardennes classics, Giro d’Italia (where he would be a domestique of Joaquín Rodríguez) and Vuelta a España (where he would be leader). It would be a great ocassion to clean his name and his conscience, as advices him the priest Marco Pozza, who told him to confess his doping in front of five hundred pupils and to sign his contract with Katusha before the same children. Everything, that said, if legal considerations doesn’t brake his incorporation… At this moment, everything is a ‘would’…

¿Es ilegal el fichaje de Di Luca por Katusha?

Esta mañana, el diario deportivo italiano la Gazzetta dello Sport publicaba la noticia del día en el mundo del ciclismo: Danilo Di Luca se incorporaba al conjunto Katusha de cara a la temporada 2011. La única condición impuesta por Andrei Tchmil, mánager de la escuadra rusa, era que el ciclista de Spoltore debía correr a coste cero, recibiendo sólo bonificiaciones por objetivos…

Las entretelas del fichaje son, cuando menos, dudosas. Dejando aparte consideraciones deportivas sobre qué puede ofrecer Di Luca a Katusha toda vez que cuenta 34 años y lleva dos temporadas sin competir, e incluso también las éticas sobre las posibles implicaciones de incorporar a un corredor en cuyo haber figuran varios flirteos con el dopaje, lo cierto es que legalmente el movimiento es inapropiado en su práctica totalidad. Aunque Di Luca ya ha cumplido su sanción y es libre de firmar con cualquier equipo (de hecho Astaná le sondeó varios meses), no puede hacerlo con Katusha y, en teoría, tampoco puede hacerlo sin cobrar un salario base.
¿Correr sin cobrar? En principio no es posible…
La disposición número 10 del Convenio Colectivo suscrito entre la Asociación Internacional de Equipos Ciclistas Profesionales (AIGCP) y la Asociación de Ciclistas Profesionales (CPA), vigente en estos momentos a la hora de regir los contratos entre corredores y escuadras, establece como sueldo mínimo 33.000 € al año (que se ven aumentados a unos 50.000 € en el caso de los ProTeam participantes en el UCI World Tour según el reglamento UCI) para cualquier ciclista no neo-profesional, a los cuales se pueden añadir bonificaciones acordadas por corredor y equipo. Esta disposición hace ilegal la contratación de Di Luca “a coste cero”…
SIn embargo, existe una cláusula en el citado Convenio Colectivo que permite eludir esta traba. En caso de acuerdo entre ciclista y equipo para vulnerar la norma, el Consejo del UCI World Tour puede establecer excepciones. De hecho, el caso de Danilo Di Luca no es el primero existente en el ciclismo profesional; oficialmente, tampoco Jorg Jaksche ni Lance Armstrong cobraron de los equipos Cinelli y Astaná en 2008 y 2009, respectivamente. Por no hablar de las decenas de casos existentes donde los corredores no ven ni uno solo de los euros firmados…
Con Di Luca, la plantilla de Katusha estaría fuera de las normas
El verdadero problema para el fichaje de Danilo Di Luca por Katusha viene porque, de incorporar al italiano, la composición de la plantilla del equipo ruso devendría ilegal como ya lo era la que se desprendía de sus movimientos en el mercado. Según las sucesivas noticias invernales, la escuadra contaba en sus filas con treinta ciclistas siendo sólo uno de ellos neoprofesional (el ruso Egor Silin), cuando la UCI establece en su disposición 2.15.110 un mínimo de dos y un máximo de cinco para los conjuntos que lleguen a ese máximo de treinta corredores contratados. Conviene en este punto explicar que, para la UCI, un neoprofesional es un ciclista que firma antes o durante su vigesimosegundo año de vida un primer contrato con un equipo ProTeam (Primera División) o Profesional (Segunda), perdiendo la condición de ‘neo’ al final de su segundo año como profesional.
La cifra de efectivos en plantilla de Katusha descendió más adelante a veintinueve toda vez que Artem Ovechkin fue “cortado” antes del primer ‘stage’ invernal del equipo en Calpe. Con ello, la composición de la plantilla volvió a ser legal, y sólo sujeta a ampliación en caso de fichaje de un corredor de 22 años ó menos sin experiencia en profesionales. La incorporación de Di Luca es, por tanto, ilegal desde ese punto de vista. Ahora bien: Andrei Tchmil aún no ha dicho su última palabra en este tema. Ahora mismo sólo hay registrados en la UCI en la plantilla de Katusha 26 ciclistas, faltando por inscribirse de entre los que tienen contrato con la estructura Arkímedes Arguelyes, Joaquín Rodríguez y el ‘neo’ Egor Silin. La escuadra rusa puede registrar a Silin e incluso un neoprofesional más, pero sólo dos corredores de entre Arguelyes, Rodríguez y Di Luca…
Si logra sortear todos estos problemas legales, Danilo Di Luca tendrá la oportunidad de volver al ciclismo de primer nivel en las filas de Katusha. Su calendario estaría compuesto por, entre otras carreras, Tirreno-Adriático, Milán-San Remo, las Árdenas, el Giro de Italia (donde acudiría como lugarteniente de ‘Purito’ Rodríguez) y la Vuelta a España (donde sería el líder). Sería una auténtica ocasión de oro para limpiar su nombre y su conciencia, tal y como le aconseja el sacerdote Marco Pozza, quien le instó a reconocer su dopaje ante quinientos escolares y le hará también firmar su contrato con Katusha ante los mismos niños. Todo ello, eso sí, si las complicaciones legales no tumban su fichaje…

Gracias a Stephan van der Zwan, redactor jefe de Wielerland.nl, por la ayuda prestada para la elaboración de este reportaje

Actualización [11/01, 18:52] Katusha ha logrado resolver los dos problemas que planteaba fichar a Danilo Di Luca. Para hacer legal la composición de la plantilla han cortado a Timofei Kristyi, a quien envían de vuelta a su filial continental Itera-Katusha. En cuanto a la posibilidad de que Di Luca corra sin cobrar, la UCI se ha negado a ello e insta al cuadro directivo del equipo ruso a pagarle el sueldo mínimo… Por supuesto, se han visto obligados a aceptar.

Las claves del nuevo Garmin – Cervélo

El ciclismo es el deporte endémico por excelencia. Lo que pasa en su alto nivel sin ser visto como algo extraordinario ocurre muy raramente en el resto del deporte profesional, llámese fútbol, baloncesto o motociclismo. Es lo que sucede, por ejemplo, con las fusiones de equipos.
Cada año hay rumores de posibles fusiones dentro del pelotón. Estructuras que andan cortas de dinero pueden unir fuerzas, siempre que sus condiciones económicas y administrativas se lo permitan, para continuar en las carreteras una temporada más o incluso formar un proyecto estable a corto plazo. Fue el caso este abril del modesto Heraklion – Kastro – Murcia, que juntó a la estructura de Contentpolis (con Francisco Mancebo en sus filas) con el modesto Heraklion griego, formado por pistards del país heleno. El experimento, exitoso, parece llamado a tener continuidad en el futuro.
Históricamente, a un nivel muy superior, son paradigmáticas las fusiones que acabaron construyendo el gigantesco Mapei de finales de los 90 (primero con CLAS, luego con GB-MG), un equipo que aún hoy sobrevive como Quick Step. Hace relativamente poco, el conjunto Saeco juntó su estructura con la de Lampre para dar lugar al conjunto homónimo liderado esta temporada por Damiano Cunego. También Domo, formación belga de nivel medio-alto, unió sus destinos con el histórico Lotto en 2002 para sentar las bases del actual Omega Pharma-Lotto.

La marcha de la supuesta fusión
Es por ello que, cuando los rumores sobre una posible fusión entre Garmin y Cervélo arreciaron, basándose en la falta de liquidez del equipo sustentado por la marca de bicicletas suiza, nadie se sorprendió. Todo pareció encaminarse cuando se anunció que el conjunto Garmin cerraba una “exitosa relación” de cuatro años con su suministradora de máquinas Felt para pasar a usar las fabricadas por Gerard Vroomen y Phil White.
“Se ha presentado una ocasión de dar un salto más rápido de lo previsto. Todo encajaba, no teníamos mucha gente bajo contrato para el año que viene, y era posible realizar la fusión”, respondía sonriendo el director de Garmin-Transitions Johnny Weltz a preguntas de Arueda durante las primeras etapas de la Vuelta a España. La fusión parecía un hecho. Como parte de ella llegaban en principio Roger Hammond, Heinrich Haussler, Thor Hushovd y Andreas Klier; más adelante se confirmarían las llegadas de Daniel Lloyd, Gabriel Rasch (amigo íntimo de Hushovd) y Brett Lancaster, iniciador del rumor de fusión al anunciar en su twitter que iba a empezar a “buscar casa en Girona”, centro de operaciones del equipo Garmin.

Una maniobra para no asumir las obligaciones de Cervélo
Las principales fuentes de información del mundillo ciclista hablaban de fusión, medios afines a la escuadra de Jonathan Vaughters también lo hacían. Incluso Johnny Weltz admitía hablar de fusión. Sin embargo, no se podía hablar de fusión propiamente dicha. Una fuente cercana a la negociación nos lo aclaraba: no había fusión mercantil, la empresa Cycling United Racing AG (razón social del conjunto Cervélo) cesaba su existencia y Slipstream Sports (Garmin) tomaba el patrocinio de la marca Cervélo y, si tenía interés por ello, intentaría fichar a corredores del próximamente difunto equipo suizo.
El por qué de este proceder, en lugar de juntar ambas sociedades en una sola creada ‘ad hoc’ o de que una absorbiera a otra, responde a motivos económicos. Hubiera supuesto a Garmin asumir los contratos de un total de doce ciclistas de Cervélo, cuya relación con Cycling United se extendía hasta diciembre de 2011; de esta manera, Slipstream Sports (y en definitiva el futuro Garmin – Cervélo) se lava las manos con respecto de esos doce corredores. A estos solo les queda esperar que les hagan un hueco en el nuevo bloque o denunciar a la estructura ante la UCI por incumplimiento de contrato, lo que daría lugar a la ejecución de los avales depositados ante la UCI por el equipo al inicio de temporada y a que el ciclista cobrara tres meses del año que no correrá en Cervélo, quedando eso sí libre para comprometerse con otra formación para 2011. En definitiva, se lleva a cabo una triquiñuela legal para evitar doce contratos económicamente indeseables.
¿Cuál es el futuro para todos los corredores que quedan libres de Cervélo? Aparte de los ya mencionados incorporados al futuro Garmin, el esprinter Theo Bos se ha comprometido con Rabobank. El potente Ignatas Konovalovas y el escalador Xavi Tondo, actual tercer clasificado de la Vuelta a España, han firmado con Movistar, equipo con el que se relaciona al vallisoletano Oscar Pujol. Por su parte Carlos Sastre, uno de los alma máter de Cervélo, fue el primero en cerrar su futuro uniendo sus destinos con Geox; siguió sus pasos el joven suizo Marcel Wyss y podrían hacer lo propio el director Álex Sans y el veterano Iñigo Cuesta, corredor que el director de Geox Joxean Fernández ‘Matxin’ ya reconoció en Arueda estar dispuesto a contratar. El resto de corredores aún libres son igualmente interesantes para cualquier escuadra ProTour; Cervélo era uno de los conjuntos de mayor nivel medio, como ejemplifican el catalán Xavi Florencio, Philip Deignan (relacionado con AG2R) o Stefan Denifl. En cuanto al staff, se da por hecho que parte de él podría incorporarse al Garmin – Cervélo femenino o quedarse en el masculino, que al ver aumentada su plantilla necesitará refuerzos en la parte técnica.

El gran potencial del Garmin – Cervélo
Y es que Garmin – Cervélo aumentará considerablemente su plantilla en cantidad y calidad con este movimiento. A los siete ciclistas ya citados procedentes de Cervélo se unirán en el plano de incorporaciones Christophe Le Mével de la Française des Jeux y el prometedor vueltómano yanqui Andrew Talansky. Pero es que la lista de fichajes de Cervélo podría ampliarse; Jonathan Vaughters aseguró en declaraciones a VeloNation que “llegaremos al máximo, a los treinta ciclistas en plantilla”, mientras que hay rumores de que el propio Vaughters está intentando liquidar contratos de algunos corredores de la base americana de la escuadra que no han acabado de colmar las expectativas para hacer hueco.
Todo para mejorar el nivel medio de un bloque que, en ese aspecto, ha dejado mucho que desear. Muestra de ello son las alineaciones de Garmin en las grandes vueltas de 2010: cuatro corredores (Julian Dean, Christian Vandevelde, Tyler Farrar y David Millar) han tomado la salida en las tres. “La base del equipo”, asiente Johnny Weltz, que sin embargo puntualiza: “Querían repetir en las cuatro grandes vueltas. Tenemos otros corredores más apropiados para las clásicas, mientras estos cuatro no llegan cascados y les viene bien correr las grandes”. Unos argumentos algo débiles para excusar lo que parece una impepinable demostración de falta de talento en la plantilla de Garmin para esta temporada.
El próximo año, en cambio, las cosas cambiarán. El propio Weltz lo deja claro: “Llega un paquete de corredores de clase mundial. El resultado será un bloque muy sólido”. Quizá en las grandes vueltas la vida siga igual, puesto que aparte de Le Mével ninguna incorporación se hará sentir inmediatamente en este tipo de pruebas. Sin embargo, en clásicas el potencial de la formación sí ganará enteros. “Ya no tendremos que poner todos los huevos en la misma cesta. Como sucede con Quick Step, tendremos muchas bazas que jugar”. Realmente, en las clásicas de pavés, el bloque formado por los recién llegados Hushovd, Haussler, Klier y Hammond sumados a hombres como Van Summeren, Maaskant, Millar o Farrar que ya este año se encontraban en las fials de Garmin será de respetar o incluso de temer. Un auténtico rival para el Quick Step que refería Weltz.
Todas estas son las claves del refuerzo realizado por Cervélo al conjunto Garmin, que dará lugar a una nueva super estructura que se suma a la de Sky, Katusha, Movistar o HTC – Columbia en el panorama del ciclismo mundial. La escuadra capitaneada por Jonathan Vaughters está destinada a ser protagonista en las clásicas y estar muy presente en las grandes vueltas, lo cual es sin duda una gran noticia e incluso un aliciente de cara al año que viene. El pero, sin embargo, viene por cómo para posibilitar esto se ha liquidado a un equipo que parecía tener un gran recorrido, que ha costado muchos desvelos… y que podría dejar a una docena de ciclistas con el futuro aparentemente resuelto hace menos de un mes en la calle, sin derecho siquiera a cobrar íntegros sus contratos gracias a una triquiñuela legal. Eso no fue lo que se filtró en los medios de comunicación al principio de las negociaciones.

La Vuelta deja fuera a RadioShack

A mediodía de ayer, la organización de la Vuelta a España remitía una nota de prensa con veintidós equipos y una nota al pie informando de su decisión respecto de la lista de invitados a la gran ronda española. Y con ello se desataba la guerra dialéctica.
Las escuadras que tomarán parte en la Vuelta serán, según los deseos de Unipublic, las dieciséis que firmaron el llamado ‘Acuerdo de Londres’ hace dos años (básicamente, los ProTour de 2008 que siguen en las carreteras) y seis que son directamente invitadas por la organización: los ProTour Sky, Katusha y Garmin y los profesionales Cervélo, Andalucía – Cajasur y Xacobeo – Galicia. Una selección, según declara Javier Guillén [máximo ejecutivo de la Vuelta a España] en As llevada a cabo en base a «criterios estrictamente deportivos», que deja fuera de la carrera a la gran sensación de su pasada edición de la gran ronda española, Vacansoleil, al BMC de Cadel Evans y a uno de los indiscutibles mejores equipos del mundo, RadioShack.
Es en el seno de esta última estructura donde se ha hecho notar más el descontento y la indignación con Unipublic. La primera reacción fue de Johan Bruyneel, que en su Twitter anunció recién conocida la noticia que haría comentarios «interesantes y picantes». Más tarde, emitió un comunicado donde se mostró «no sólo sorprendido, sino perplejo. Pensé que se trataba de un error y llamé a Javier Guillén para que me diera explicaciones. Me dijo que no ofrecíamos un equipo suficientemente bueno y no me lo podía creer. Sólo con Leipheimer, Klöden, Horner y Brajkovic llevábamos a cuatro potenciales ganadores de la Vuelta. Era nuestro otro objetivo del año junto al Tour, por eso (y porque debíamos correr la Vuelta a California) no corrimos el Giro de Italia».
Si tomamos lo que dice Bruyneel como cierto, realmente la razón no está con Unipublic. Leipheimer, Klöden, Horner y Brajkovic parecen corredores de entidad suficiente como para garantizar la invitación del que, por otra parte, es el octavo equipo del mundo según el Ránking UCI y el quinto según CQ Ránking. Ahora bien, no parece que esa fuera efectivamente la alineación que RadioShack planeaba disponer en la gran ronda española.
Según algunas fuentes y declaraciones de Chechu Rubiera a Biciciclismo, ésta incluía a Janez Brajkovic, Chris Horner, Geert Steegmans y el bloque ibérico del equipo conformado por el propio Rubiera (que con la decisión de Unipublic no estará en el estreno en competición de la cima que lleva su nombre, también conocida como Coto Bello), Zubeldia, Irízar, Machado y Paulinho. Pero no por Leipheimer y Klöden, que de cumplir un calendario formado por Tour y Vuelta acabarían la temporada con 80 días de competición, una cifra a todas luces excesiva para ciclistas de 37 y 35 años respectivamente.
Así, no parece que Bruyneel las tenga todas consigo; pero lo mismo se puede decir de Javier Guillén. El valor deportivo del ‘nueve’ preseleccionado por RadioShack es enorme más allá de las ausencias de sus cabezas de cartel, empezando por el heptacampeón del Tour Lance Armstrong. No puede ser que sea el factor decisivo para esta no invitación a la Vuelta. Más bien puede que lo sea la nota al pie a la cual hacíamos referencia al principio, que establece que «Unipublic se reserva la posibilidad de modificar esta lista si circunstancias importantes así lo aconsejaran, teniendo siempre muy presentes las responsabilidades éticas de los participantes y su calidad deportiva», y la intención sea presionar a RadioShack para que mejor aún más su propuesta.
O quizá, como señala en algunos mentideros, sea un castigo al equipo americano por lo que pueda haber de cierto en las declaraciones de Landis. O por las posturas contrarias a las sostenidas por las grandes autoridades que Bruyneel y Armstrong han adoptado en asuntos de trascendencia para el futuro del ciclismo. Un ciclismo que Bruyneel afirma «estar dispuesto a hacer todo lo posible para profesionalizar» en un pequeño ataque de megalomanía.
En Vacansoleil, en cambio, la decisión de Unipublic de dejarles fuera de la Vuelta en favor de equipos de menor calidad como Garmin o cuyo desprecio por el calendario español ha sido manifiesto como Sky ha sido acogida con resignación. Su mánager Dan Luijkx ha declarado que «es lamentable que no podamos hacer ninguna gran vuelta en 2010 después de lo bien y rápido que anduvo todo en 2009… Esperamos que estas peleas entre organizadores y equipos se acaben cuando llegue el nuevo sistema en 2011. Estamos tristes, pero tenemos que centrarnos en las muchas citas grandes que nos quedan en estos meses». Evita así las polémicas el gerente del conjunto holandés, que revolucionó varias veces la gran ronda española el año pasado con su actitud combativa, y se pone en manos del sistema de invitaciones previsto para la próxima campaña, basado en méritos deportivos y no en económicos o, directamente, subjetivos.
El tercer agraviado significativo por la no invitación a la Vuelta a España, BMC, se lo toma con aún mayor filosofía y, sobre todo, con realismo. Y es que no posee plantilla ni estructura suficiente para afrontar las tres grandes rondas esta temporada, hecho que se hubiera consumado de haber estado presentes en la salida de Sevilla. «Nuestros planes pasaban por competir en un ‘grande’, el Giro de Italia», explica ufano el mánager Jim Ochowicz, «y eventualmente una segunda, el Tour de Francia. Pero hacer la Vuelta, en 2010, no era posible».
Por lo que respecta a los equipos a los que se ha otorgado una invitación, las reacciones de alegría han sido mucho más tibias. Andalucía, cuya viablidad depende en gran medida de estar presente en la gran ronda española, expresaba su agradecimiento a través de su jefe de filas José Ángel Gómez Marchante. Xacobeo, por su parte, afirmaba que su objetivo será mejorar en la Vuelta de 2010 lo hecho en la de 2009, para lo cual contará con el liderazgo de Ezequiel Mosquera y el respaldo de buenos elementos como David García Dapena, Gustavo César o Rodrigo García. Dave Brailsford, mánager de Sky, hablaba de un «voto de confianza de Unipublic», mientras Katusha, Garmin y Cervélo aún no han realizado ninguna declaración al respecto. Los primeros están dentro por la predilección de Javier Guillén por su líder Joaquín Rodríguez; los segundos, por Tyler Farrar; los terceros, por Carlos Sastre. Ahora bien, no se sabe si por su presencia en el ‘nueve’ de la Vuelta o por su poder fáctico…

* Agradecimiento a Daniel Sánchez por su traducción de las declaraciones de Dan Luijkx

Valverde, el pecado original y la marca de Caín

Hubo un tiempo en que en el ciclismo, como en el cristianismo, existía un pecado original. Una trampa presupuesta, una mala acción que se consideraba prácticamente inherente al corredor que llegaba al profesionalismo y penalizaba su imagen desde el mismo momento en que aparecía en el primer plano mediático subido en la bicicleta. «Ese», decía el televidente, «es un dopado». Y ante eso sólo unos pocos ‘rara avis’ podían desafiar a la opinión (¿quizá el saber?) general y decir con la frente alta: «Yo no. Yo estoy limpio». Al resto no les quedaba sino agachar la cabeza y seguir pedaleando.
La Operación Puerto vino a poner esto de manifiesto. Supuso una purga, la penúltima en la serie de escándalos que inauguró del ‘caso Festina’ y parece haberse clausurado con el pasaporte biológico que, se supone, ha limpiado el ciclismo de cualquier atisbo de dopaje. Aquel 22 de Mayo de 2006 en el cual se destapó la mayor red de «preparación deportiva» (mezquino eufemismo) fue una inmensa catarsis, en especial, para el ciclismo español; se dice que pudo haberlo sido para todo el deporte, pero las autoridades prefirieron no salir de las dos ruedas.
Decenas de corredores cayeron en desgracia gracias a esta operación de la Guardia Civil. Cayeron, sobre todo, dos de los equipos que peor fama arrastraban dentro del panorama nacional y, quizá, mundial: Kelme y ONCE. Dos escuadras históricas, ahora añoradas y en aquel tiempo poco defendidas por el grueso del colectivo ciclista: ni quienes se sentaban en los despacho ni aquellos que aplaudían en las cunetas alzaron la voz. No clamaron. Y quienes sí se atrevieron a moverse, los corredores que se plantaron en el Campeonato de España, fueron comparados por algunos medios con «trileros que se manifestaban porque les han descubierto el truco». En resumidas cuentas, a decenas de esforzados de la ruta se les destensó la cuerda sobre la cual danzaban en el vacío. Se consideraba que, de alguna manera, habían pagado por su pecado original.
Hubo sin embargo quien siguió teniendo la cuerda tensa. Personas que fueron protegidas de su pecado original con otro artefacto bíblico, la marca de Caín. Ésa que señalaba al hijo de Eva como asesino de su hermano Abel pero, a la vez, le hacía inmune ante cualquier ataque. Los nombres de estos corredores difícilmente saldrán algún día a la luz, sólo hay suspicacias en torno a ellos. Sólo uno vio reflejado su sambenito más allá del rumor: Alejandro Valverde. Posiblemente uno de los tres mayores talentos de lo que llevamos de siglo, el murciano estaba presente de manera prácticamente inequívoca en los papeles de la Operación Puerto. Bolsa 18 de sangre: Valv.(Piti). Del año 2003. Su penúltima temporada en Kelme.
Se dice que, por mucho que corra el hombre, su pasado será más rápido que él y acabará por alcanzarlo. En el caso de Alejandro, el pasado le ha dado caza a lomos del empeño de un jurista italiano, el fiscal del CONI Ettore Torri, deseando cortar la cabeza del superclase español para equiparar su condición de implicado en la Operación Puerto a la de sus compatriotas Michele Scarponi e Ivan Basso, a quienes tuvo que sancionar tras hallarles culpables de relacionarse con Eufemiano Fuentes, uno de los mayores gurús del dopaje de la historia.
Le costó cuatro años y cientos de procedimientos torticeros, pero lo consiguió. Torri abrió procesos disciplinarios insulsos ‘per se’, convocó audiencias que no parecían ir a ninguna parte; movió Roma con Santiago casi sin resultado. Hasta que, en invierno de 2008, el juez que instruía en España la Operación Puerto se fue de vacaciones y su sustituta, que no estaba aleccionada de cómo llevar adelante la marca de Caín que protegía a Alejandro Valverde, le cedió parte de la bolsa de sangre número 18 de las incautadas en los dominios de Eufemiano. A partir de ahí, a través de una serie de maniobras muy lógicas en el bricolage casero pero dudosísimas en el terreno jurídico, Ettore Torri demostró que esa sangre, que contenía EPO, pertenecía a Valverde.
La connivencia de AMA y UCI, cuya manifiesta antipatía hacia el murciano se hizo patente en numerosas ocasiones, hizo el resto. El enroque de la RFEC, la justicia española y el propio Valverde no resistieron más el acoso proveniente de Italia y Suiza. El TAS decidió el pasado lunes en favor de los extranjeros, que construyeron una versión totalmente verosímil de los hechos mientras la defensa del español se centraba en tumbarla mediante defectos de forma, un tibio argumento ante un tribunal más humano que tecnócrata como es el de Arbitraje Deportivo. Alejandro Valverde no volverá a correr más hasta el 1 de Enero de 2012 y perderá todos sus resultados de 2010 con efecto retroactivo.
La astronómica cantidad de dinero gastada por el corredor de Caisse d’Épargne en abogados (los rumores no coinciden en las cifras, pero ninguno baja del millón de euros) sólo ha dilatado el proceso; no habrá servido de nada si no prosperan los deseperados recursos que los abogados interpondrán en los tribunales suizos en las próximas fechas. Tampoco habrán servido su condición de paladín del ciclismo español, ni sus múltiples victorias, ni los centenares de controles antidopaje con resultado negativo que ha pasado estos años. La marca de Caín ha caído y todos estaban dispuestos a vengar a un imaginario Abel. Dispuestos a que Alejandro Valverde pagara por su pecado original, bruma de otro tiempo.

Vinokourov contra la memoria del ciclismo

El pasado domingo, Alexandre Vinokourov dejó atrás a Alexandr Kolobnev en los últimos compases de la Cöté d’Ans para imponerse por segunda vez en la Lieja-Bastogne-Lieja. El kazajo entró en meta extendiendo los brazos, lanzando besos, aplaudiendo, loco de alegría por volver al primer plano del ciclismo. Su gesto de torció cuando subió al podio, recogió su trofeo… y el público le abucheó.

El ciclismo es un deporte de memoria y sentimientos. Los resultados permanecen en los papeles, pero el recuerdo de los aficionados se compone de sensaciones y no de números. La victoria de Vinokourov fue recibida por los belgas presentes en la meta de Ans como una ofensa después de que el kazajo protagonizara en 2007 uno de los positivos más sonados de la historia. Un positivo especialmente sangrante por cómo intento tomar el pelo al mundo del ciclismo antes, durante y después de que un control antidopaje delatara que había recurrido a una transfusión homóloga (de sangre ajena) para aumentar su rendimiento.
Alexandre Vinokourov (1973, Petropavlosk) no fue nunca un ángel. Al contrario, siempre resultó un ciclista controvertido, de gran calidad y mayor víscera. Ello le convertía en un corredor combativo en carrera, agradable para el aficionado pero incómodo para los compañeros, que veían como el insaciable kazajo no hacía más que reclamar más trozo del pastel competitivo, más presencia en carrera. Llegó a reclamar el liderazgo del Telekom en pleno esplendor de Jan Ullrich y a atacar a por la victoria (con éxito) en la llegada a los Campos Elíseos del Tour de Francia de 2005, en un coto habitualmente vedado para caza de los esprinters donde sus ganas de lucha le llevaron a triunfar.
Era un corredor polivalente, querido y amado, hasta que los delirios de grandeza comenzaron a pesar demasiado en su cabeza. Su inmenso poder fáctico en Kazajastán, procedente de su condición de deportista insignia del país y su amistad con los más altos mandatarios, hizo posible que las principales empresas del país le proporcionaran dinero para financiar la estructura de Manolo Sáiz en cuyas filas formaba (aquel Liberty Seguros defenestrado por la OP) y luego una escuadra propia, el Astaná con que tomó parte en el Tour de Francia 2007. En él, Vinokourov contaba con sus habituales cualidades y el respaldo de una pléyade de gregarios excepcionales como su compatriota Andrei Kasheckin, Andreas Klöden o Paolo Savoldelli. El objetivo no era otro que el maillot amarillo.
No aprovechó Vinokourov la oportunidad de ganar en buena lid. Fue perdiendo tiempo en todas las etapas decisivas hasta quedar a casi ocho minutos del líder Rasmussen antes de la importante crono de Albi, en la segunda semana de la carrera. En ella, el kazajo perpetró su primera exhibición, distanciando al siguiente (un consumado especialista como Cadel Evans) en más de un minuto. La segunda, más estratosférica si cabe, la realizó camino de Loudenville, en la mítica etapa en la cual Alberto Contador y Michael Rasmussen libraron un espectacular mano a mano en el Col de Peyresourde. Vino aventajó en un minuto al segundo en la línea de meta después de pasar todo el día fugado. Y de haber perdido media hora el día anterior en Plateau de Beille.
Las sospechas suscitadas por estas prestaciones se confirmaron al día siguiente, mientras el corredor declaraba gozoso en L’Équipe que su presencia inspiraba «respeto en el pelotón». El 24 de Julio, día de descanso, salía a la luz su positivo en la crono de Albi. Transfusión homóloga, un término con el cual los aficionados al ciclismo se familiarizaron dolorosamente durante un tiempo. Todo el Astaná tuvo que abandonar la carrera, con gesto compungido y en furgonetas; parecían más presos que ciclistas. Vinokourov, por su parte, montó su teatro y echó la culpa del positivo a las alteraciones que le pudo haber generado una caída en la quinta etapa.
Los actos que vinieron después continuaron el esperpento. Vinokourov anunció su retirada y se parapetó tras la Federación Kazaja de Ciclismo para recibir un único año de sanción y no pagar su sueldo de 2007 como multa tal y como contemplaba el Código Ético que tuvo que firmar aquella campaña para participar en las carreras ProTour. La UCI, errática, no consiguió hacer pagar a Vino, pero sí extender su sanción hasta los dos años que la normativa vigente impone como máxima para los culpables de dopaje. Ello no impidió que la sombra del kazajo permaneciera presente en el ciclismo mundial a través de declaraciones periódicas y de su imprescindible intermediación para la supervivencia del equipo Astaná.
Ahora, después de un exitoso ensayo a finales de 2009, Vinokourov ha vuelto al primer plano del ciclismo mundial. Pero lo hizo entre abucheos. La memoria de los aficionados tocó los sentimientos del kazajo, que al día siguiente mandó una carta abierta a los medios de comunicación donde afirmó no querer «ser el único y muy fácil objetivo de todos los males del ciclismo». El escepticismo volvió a reinar en los aficionados más suspicaces, que habían visto con indignación no sólo la victoria de Vinokourov, sino la compañía que tuvo en el podio de un Alejandro Valverde que sigue corriendo aun con la espada de Damocles de la sanción provocada por el CONI pendiente sobre su cabeza.
Es difícil determinar si los aficionados tienen o no razón afeando al corredor kazajo. Más allá de las filias y fobias que despierte el personaje, Vinokourov ha purgado sus penas pasando dos años sin competir. Es cierto que no cumplió la sanción completa al no ingresar su año de sueldo en las arcas de la UCI; pero sí el grueso de la misma. En teoría, tiene derecho a participar en todas las carreras que desee, derecho a ganarlas, a retirarse o a llegar fuera de control. Sin embargo el aficionado, el auténtico termómetro del ciclismo mundial a través de sus memorias y sensaciones, ha juzgado que no es digno de ello por toda la controversia que su caso, que junto al ‘affaire’ Rasmussen estuvo a punto de tumbar la carrera más grande del mundo, despertó. Aunque no tiene por qué tener razón, habrá que escuchar al público. Y Vinokourov, por su bien, deberá convencerlo.