
Vendiendo a los Xacobeo

* Agradecimiento a Daniel Sánchez por su traducción de las declaraciones de Dan Luijkx
¿Óscar Pereiro a Xacobeo?
Arueda.com
Fuera del ambiente ciclista no se recuerda como era el Pereiro de antes de aquel Tour. Dentro… es difícil recordarlo. Parecen dos corredores diferentes. El Pereiro pre2006 era un corredor combativo, sin nada que perder, capaz de ganarse la vida compitiendo en el modesto Porta da Ravessa. De embarcarse a la aventura en Phonak de la mano de Álvaro Pino para clasificarse undécimo en el loquísimo Giro’02. De acumular fugas y más fugas en el Tour’05 hasta conseguir una victoria; y, de remate, cazar otra fuga más para colocarse décimo en la general final. Ése era Pereiro.
Precisamente, fue siendo él mismo como se arruinó. En el Tour de 2006 partía de colíder de Caisse d’Épargne junto a Alejandro Valverde. El murciano fue eliminado por una caída a las primeras de cambio, él era jefe de filas único y falló en Beret. Casi veinticinco minutos de desventaja le animaron para filtrarse en una fuga camino de Montélimar junto a Chavanel, Voigt, Quinziato y Grivko. Lo recuerdo como si fuera ayer, cómo Grivko atacó y se desfondó a unos treinta kilómetros de meta. Acabó perdiendo seis minutos. Después Voigt hizo uno de sus demoledores demarrajes, Óscar se fue con él. Victoria para el alemán, el español esperaba nervioso en meta junto al locutor de TVE (¿era Carceller?). La ventaja necesaria para alcanzar el maillot amarillo, algo más de 28:30, se había superado en referencias intermedias pero parecía imposible en meta por cuanto el pelotón aceleraba en preparación del sprint por los puntos del maillot verde. Finalmente fue posible, Pereiro se puso líder con minuto y medio sobre un Landis cuyo Phonak decidió no perseguir para dejarle el trabajo de controlar la carrera al Caisse d’Épargne.
Con lo que no contaba Landis era con Pereiro aguantando como un jabato. Tampoco con el brutal petardazo que el propio americano iba a dar en La Toissure. Aquello le desquició. Al día siguiente, en una de las últimas burradas del ciclismo de los pinchazos y en una de las etapas más bonitas que se han visto en el Tour en los últimos años, Landis le dio la vuelta a la carrera con una exhibición camino de Morzine y pasando el durísmo Joux Plane. Él sólo reventó la fuga del día, reventó al pelotón que le perseguía, reventó todo. En la última crono acabó de consumar su remontada. Reventó dos carreras cuando dio positivo por testosterona. La primera, el Tour de Francia de 2006. La segunda, la carrera deportiva de Óscar Pereiro.
Los meses siguientes fueron de incertidumbre, de desmotivación, de agobio. El gallego estaba acorralado por el positivo de Landis, que le convertía en ganador legal del Tour, y por la negativa de ASO ha reconocerle este mérito. Se convirtió en un hombre mediático, y cada entrevista era lo mismo: ¿Cómo te sientes? ¿Cuándo te dan el Tour? ¿Qué injusto todo, verdad? Extenuante. A partir de entonces, Pereiro fue una sombra.
Aunque 2007 no fuera del todo un mal año, su décimo lugar en el Tour supo a poco al aficionado no especializado aunque fuera lógico para aquel que conociera el desempeño normal del gallego. 2008, sin presión por contar con el curioso paraguas de la decepción y con el escudo de un Valverde dispuesto a centrar los focos en la gran ronda francesa, parecía su temporada para la resurrección. Lo estaba siendo. Óscar lo reconocía, volvía a disfrutar sobre la bici y a ser él mismo. Atacaba, se fugaba, volvía a ser un corredor combativo que, por ejemplo, mostraba una faceta olvidada: gran descendedor. Mejor descendedor que escalador, de hecho. Y fue en una bajada donde todo volvió al suspense: en el Col d’Agnello, una caída escalofriante por un terraplén, de carretera a carretera. Todos los corredores de Caisse d’Épargne arremolinados en torno a él, Chente García Acosta pensaba que había muerto. No. Se había quedado afectado, rotos algunos huesos. Pero había salvado la vida.
Si humanamente había sido un mazazo, más aún lo había sido desde el punto de vista deportivo. La caída fue otro antes y otro después. Porque antes era difícil motivarse, pero después resultaba imposible. Se dudaba incluso de la continuidad de Pereiro en el pelotón este 2009. Sin embargo, el talentoso corredor gallego decidió intentar cumplir su contrato, y lo hizo funcionarialmente. Provocó un divorcio en el seno de su equipo. No se veía bien de cara al Tour, intentó forzar, pero camino de Envalira claudicó. Unzué, disconforme, manifestó meses después en El Mundo Deportivo que «debería haberme liado a hostias con él», una afirmación exagerada que sin embargo dice mucho. A Pereiro ya no se le quiere deportivamente en la formación bancaria, que le ha enseñado la puerta de salida. Ya habla de ella como si de un ex equipo fuera, a pesar de que dentro haya dejado «grandes amigos» gracias a su carácter extrovertido.
Pero ese no es final para un corredor tan brillante como él. Óscar no se debe conformar con retirarse en silencio, en salir por el arrastre en lugar de por la puerta grande. Aún tiene ofertas, de todos aquellos que saben que su problema no está tanto en las piernas sino en la cabeza, que es al fin y al cabo la que gira los pedales. Liquigas se ha interesado por él; incluso el Radioshack de Lance Armstrong. Pero su lugar está lejos de esos destinos internacionales en los que lleva, al fin y al cabo, tanto tiempo. Sería igual de difícil motivarse. Su destino está más abajo, en un lugar donde recibir el cariño que merece. En Xacobeo.
Los últimos días han estado llenos de rumores. Todos van en la misma dirección. Óscar quiere irse a Xacobeo, que necesitaría un nuevo patrocinador para asumir su ficha. El corredor está dispuesto a poner de su parte, a bajar su caché e incluso a no cobrar. Pino no le haría ascos si así fuera; no hay que olvidar que fue el preparador gallego quien fichó a Óscar para el equipo Phonak en 2002, consciente de sus posibilidades. Su rol en la carretera no sería tanto el de líder, ése es para Mosquera, sino el de ciclista libre que pueda aprovechar sus buenos días para destacar. Incluso, por qué no, Pereiro se puede adaptar al papel de gregario como ya ha hecho en varias ocasiones.
Más importante que su rol en la carretera sería su rol fuera de ella. Pereiro es una de esas personas nacidas para ser estrella, para presentar programas de televisión y ser, en definitiva, famoso. Un gancho mediático. El hombre capaz de amarrar la continuidad del patrocinio por parte de las autoridades gallegas al equipo Xacobeo: el cambio de gobierno lo ha puesto en duda. Y más aún con el asunto del Dr. Beltrán, médico que entró a trabajar en Xacobeo mediada la Vuelta y resultó estar implicado lateralmente en los positivos de Héctor Guerra, Nuno Ribeiro e Isidro Nozal en Portugal. Que Óscar estuviera en Xacobeo amarraría el futuro de la estructura gallega.
En los últimos días, Pereiro se ha reunido con el nuevo Secretario Xeral do Deporte de la Xunta de Galicia para tratar su incorporación al equipo Xacobeo. Para tratar la continuidad del equipo. Para hacerle un último favor al ciclismo gallego. Para hacerle un último favor a su mentor Álvaro Pino, para hacerse un favor y terminar con la cabeza bien alta su vida deportiva antes de empezar su vida en la fama más hedonista. Para darle un digno final a una carrera marcada.
Especialmente interesante resulta esta última parte. ¿Cómo puede llegar Andalucía a correr el Giro d’Italia? Si bien es cierto que su estructura es modélica, con todas las categorías del ciclismo englobadas y una dirección ejemplar, el nivel de la plantilla profesional no parece suficiente para enfrentarse a la gran ronda italiana y a la española en un mismo año. El conjunto es ahora mismo limitado, y además se tendrá que enfrentar a la pérdida de su punta de lanza Xavi Tondo, cuyo futuro parece ligado a alguna estructura Pro Tour como Astaná, Katusha ó Caisse d’Épargne. No parece que las incorporaciones que se hagan, que deben incluir al menos tres corredores del filial para seguir la política deportiva del equipo, puedan garantizar un rendimiento mínimo.
Peligroso a la hora de evaluar esto es el precedente de Xacobeo este año. El equipo gallego acudió al Giro d’Italia de este año reclamado por el organizador, ayudado por las circunstancias que le señalaban como el mejor equipo puramente español dispuesto a acudir a la ‘corsa rosa’. La mala suerte se cebó con el equipo, que perdió de inicio a Ezequiel Mosquera por una caída y a las pocas etapas vio cómo tenía que abandonar un David García Dapena que marchaba líder de la montaña. Así, el papel de la escuadra gallega quedó limitada a los fogonazos de jóvenes como Rabuñal, Marcos García ó el ruso Isaichev, que sumados al temperamento del infatigable Eduard Vorganov dieron como resultado una actuación decente… pero al fin y al cabo mediocre. Mejorable por cualquier profesional italiano como Ceramica Flaminia, que acudiría motivado además por ser el Giro su gran objetivo de la temporada.
Después de esto, ¿estarían los organizadores del Giro dispuestos a repetir la invitación de Xacobeo en detrimento de otro equipo cuyos esfuerzos se centraran exclusivamente en su carrera? Posiblemente no. El nivel dado por Xacobeo, que no olvidemos es el mejor equipo profesional español en la actualidad casi sin discusión, no anima a ello. Y menos aún anima Andalucía-Cajasur, que por ejemplo sólo ha conseguido cinco victorias este año; dos de Tondo, una de Ortega, una de Piedra y otra del asturiano Ángel Vicioso. La invitación suena poco probable y, lo que es peor, poco merecida.
El espíritu de superación que emana de la entrevista a Cabello es encomiable. Y el desarrollo del proyecto de Andalucía, modélico. Paso a paso, año a año, ha ido creciendo. Este año ya se han aventurado a correr carreras por Europa. Quizá llegue el momento de dar el gran salto. Pero es difícil hacerlo con una plantilla basada en andaluces, que no muestran precisamente un nivel muy bollante. Quizá en un futuro, con incorporaciones no andaluzas, la evolución de promesas de la estructura como Antonio Piedra ó Pablo Lechuga y la adhesión al equipo de corredores de la región que evolucionan fuera de él como Luis Ángel Maté ó Manuel Vázquez… Quizá entonces se pueda pensar en dar ese salto con garantías.
Por lo pronto, realmente, no se puede aspirar a ello. Además, un detalle algo inquietante es la «recomendación de la UCI», que suena a confusión con la ‘Label Wild Card’ que efectivamente recibieron del máximo organismo el año pasado… ó incluso a endiosamiento ante la prensa local. Ésta siempre ew fácil de engatusar en terrenos especializados tal y como demuestran muchos corredores en entrevistas antes de acudir a grandes carreras, donde casi siempre se muestran como aspirantes a la victoria.
Verdaderamente, es complicado entrar como invitado al Giro. Para Andalucía-Cajasur, por su condición de equipo modesto y español, mucho más. Aunque siempre es de aplaudir el optimismo y el afán por mejorar de este equipo, ejemplar en su gestión y capaz de mantenerse ajeno a todos los escándalos.
El equipo que más fuerte llega a la línea de salida de Assen es, sin duda, Caisse d’Épargne. La campaña del fiscal antidopaje del CONI (Cómite Olímpico Italiano) Ettore Torri contra Alejandro Valverde ha acabado con una esperpéntica sanción al ciclista murciano que le impide competir en territorio italiano, lo cual obligó a Valverde a renunciar al Tour (que transcurría ¡60 kilómetros! por territorio transalpino) y centrar sus esfuerzos en la Vuelta, ocasión propicia para desmentir a todos aquellos que dudan de su capacidad para competir por la victoria en una gran vuelta. Para conseguirlo, deberá mostrar una mayor solidez en montaña y afianzar sus progresos en contrarreloj. La aproximación, con victoria en la Vuelta a Burgos, ha sido inmejorable.
A su alrededor, Eusebio Unzué ha dispuesto a toda la artillería pesada. Joaquín Rodríguez, ya firmado por Katusha para el año que viene, será el apoyo número uno del murciano en la montaña e incluso podría tomar el liderato del equipo en caso de fallo de éste. Dani Moreno, David López, Fran Pérez y Xabi Zandio deberán también estar ahí en la montaña, mientras que en el llano serán Vasil Kyrienka, Chente García Acosta e Imanol Erviti quienes tendrá que estar cerca de Valverde.
Euskaltel, por su parte, también llega necesitado de una revindicación para su gran estrella Samuel Sánchez… y para el propio equipo, después de que los positivos de Iñigo Landaluze y, sobre todo, Mikel Astarloza dieran al traste con su buena imagen. Centrándonos en el corredor asturiano, todo parece dispuesto para que llegue en su mejor momento de forma: prácticamente no ha aparecido en toda la temporada, si dejamos aparte la Vuelta al País Vasco y su victorioso GP de Llodio. Portador anecdótico del dorsal uno ante la ausencia de Contador, le falta solidez en montaña y contrarreloj para considerarlo un favorito número uno, pero su fe y su habitual ‘punch’ en la tercera semana le confieren alguna ventaja respecto a sus rivales. Junto a él, un bloque con Igor Antón de hombre libre y Txurruka y Egoi Martínez como principales gregarios.
Aunque, si hablamos de equipos necesitados, el número uno es Fuji – Servetto. El apestado, aquel al que todos dan de lado por los positivos de Piepoli y Ricco’ cuando aún se llamaba Saunier Duval. Esta temporada ha sido muy difícil, con la escuadra en permanente vigilia para competir allá donde les dejaran. Los resultados, en estas condiciones, han sido malos. En esta Vuelta debe justificar, más que ninguno, el año entero de patrocinio. Para ello acude con los mejores: el irregular Juanjo Cobo como teórico líder (aunque con molestias físicas), mientras por detrás hay tres extranjeros capaces de lo mejor e incluso de colarse en el podio final de Madrid. Se trata del italiano Eros Capecchi, el croata Robert Kiserlovski y el sueco Frederik Kessiakoff, recientemente contratado por Garmin. Otros nombres destacados del nueve son el prometedor Beñat Intxausti y el ‘niño prodigio’ Arkaitz Durán.
Con respecto a los tres equipos de segunda división, dos llegan con las mejores galas… y otro no. Este es Andalucía – Cajasur, una escuadra perseguida por el infortunio en su camino para la Vuelta. Contaba con cuatro líderes a principio de año: Xavi Tondo, Javi Moreno, Ángel Vicioso y José Antonio Redondo. Moreno y Vicioso han sufrido sendas caídas y se han visto obligados a renunciar; Redondo dio positivo en junio y salió por la puerta de atrás merecidamente después de no dar ni una cuarta parte de lo que ha recibido. Sólo queda en pie Xavi Tondo, que parte con opciones serias de hacer entre los diez primeros tras un año sensacional y exitoso que quizá le pase factura con el paso de los días. Tras él, un bloque combativo aunque poco cualificado donde destaca Antonio Piedra, buen escalador y reciente ganador de etapa en la Volta a Portugal.
Por su parte, Contentpolis-AMPO sí llega con todo a esta Vuelta. Sólo faltan, de entre sus mejores hombres, el lesionado José Herrada y Javier Etxarri. El resto, está: desde el trío de sprinters formado por Gaztañaga, Pacheco y Benítez, hasta combativos como Palomares ó Manuel Vázquez que podrían obtener un triunfo de etapa. Precisamente el propio Vázquez ó Julián Sánchez Pimienta pueden ser buenas opciones para un puesto entre los diez primeros de la general, aunque ésta parece más bien una meta lejana para el equipo dirigido por José Manuel López. Un punto de interés alrededor de esta escuadra será también el rendimiento en cronos del joven Sergio Domínguez, a priori prometedor en este terreno.
Por último, Xacobeo – Galicia Calidad y una sola palabra: Mosquera. El ciclista de Teo llega a la salida pensando en mejorar su actuación del año pasado, cuando acabó cuarto e incluso peleó de tú a tú con el todopoderoso Alberto Contador. Viene, como dijo en una entrevista que publicamos aquí [enlace!], «aspirando al podio». Sin duda, podrá; más aún, teniendo a su alrededor un bloque potente con Gustavo César ó Gustavo Domínguez, más opciones de victoria encarnadas en los siempre incisivos David García Dapena, Eduard Vorganov y David Herrero.
Entrevista a Javier Guillén
Arueda.com
¿Cuáles son las dificultades logísticas de llegar hasta el límite máximo de equipos marcado por la UCI?
Las dificultades logísticas radican en que, cuantos más equipos, más movimiento. Los problemas que generan son, básicamente, dos. El primero es el control de carrera: es más sencillo cuanto menos equipo haya, dado que en consecuencia habrá menos participantes. El segundo es un tema logístico muy importante: la Vuelta a España sobre todo quiere dar calidad, y uno de los puntos donde hay que darla es en los hoteles. Estos deben cumplir dos parámetros: uno es el estrellaje, hoteles de cuatro y cinco estrellas; y el otro es que sean hoteles próximos a las salidas y llegadas, para que una vez acabe la etapa el corredor no tenga que hacer, además de lo que ha hecho ya dando pedales, un traslado en autobús. Hay lugares donde hay déficit de hoteles y en los que, por lo tanto, cumplir ese patrón es difícil. Por eso, cuanto menos equipos, más fácil acoplarlos. Esas son las dificultades, esa es la margarita que nos queda por deshojar, si 20, 21 ó 22 equipos; y creo que en quince días tomaremos la decisión.
¿Cuántos equipos han pedido estar presentes en la Vuelta?
Han pedido invitación todos los Pro Tour, ellos tienen el derecho a venir y nosotros la obligación de aceptarles; y todos los profesionales han pedido participar en la Vuelta. Este año va a ser muy difícil determinar los participantes; nos gustaría que algún equipo Pro Tour renunciara a su plaza, pero no sólo no lo hacen sino que se nos acumulan las dificultades al haber otros profesionales que lo están haciendo realmente bien. También es verdad que prefiero estar en esta situación, que quieran venir muchos, a tener la contraria.
¿Cuáles son los atractivos de esta Vuelta para los equipos?
Es una Vuelta muy internacional. Salimos de Holanda, pasamos por Alemania, terminamos en Bélgica nuestro periplo europeo; luego vamos a Tarragona, donde vamos a ofreceremos una carrera muy diferente, porque tendremos una gran carga de montaña sin proponer Pirineos ni nuestra querida Asturias. Los elementos para que todos quieran venir son muchos, y ahí están los resultados. Nadie dice “no quiero ir”.
Durante este tiempo se ha especulado mucho en torno a la invitación del conjunto holandés Vacansoleil. ¿Se le va a invitar? ¿Dará el nivel si es en efecto invitado?
Vacansoleil, como Skil – Shimano, son dos equipos que están muy presentes en nuestros pensamientos. Es cierto que Rabobank tiene asegurada la participación en la Vuelta, pero eso no es óbice; hay que tener muy en cuenta el recorrido. Salimos de Holanda, y por tanto en nuestras quinielas está la posibilidad de incluirles. Pero también es cierto que, si yo fuera holandés, tampoco me haría muchas ilusiones; sólo las mismas que si fuera un equipo continental profesional español o uno italiano, que este año en el Giro han demostrado un altísimo nivel. Como, por ejemplo, el LPR de Danilo Di Luca. Yo, en este momento, en ese tema sólo puedo decir que se barajan todas las opciones y más adelante tomaremos la decisión. Estamos recibiendo “presiones cariñosas” por parte de Holanda para que incluyamos otro equipo holandés, pero sólo hay sitio para 22, hay muchos condicionantes…
¿Tendrán los tres continentales profesionales españoles [Andalucía-Cajasur, Murcia-AMPO y Xacobeo-Galicia] la oportunidad de participar en la Vuelta?
Los tres tienen la posibilidad de participar en la Vuelta, a mí me gustaría que participaran. Este es un año distinto, y a la crisis que ha podido sufrir el ciclismo debido al dopaje se ha añadido otra de carácter económico. Yo quiero que la Vuelta haga un poco de patria e intentemos tener a los profesionales continentales españoles en la carrera. No sé que pasará, aún estamos dándole vueltas; creo que hay muchas posibilidades de que estén los tres, pero de momento no me puedo manifestar con seguridad al respecto.
¿Qué supone la participación de Iván Basso en la Vuelta?
Es una magnífica noticia para la carrera. Iván Basso es un corredor que ya ha pagado por sus culpas, se ha arrepentido, reconoció que no lo hizo bien y creo que eso debe ser primado y no reprochado. Desde luego, la Vuelta a España está absolutamente encantada de que Iván Basso no sólo venga a la carrera, sino que venga con intención de ganarla.
El gancho mediático de Carlos Sastre ó Alberto Contador, ¿puede ser una buena referencia para reconstruir la imagen del ciclismo en España?
Yo creo que el gancho de todos aquellos que tienen triunfos a nivel mundial en el ciclismo (Sastre, Contador, Pereiro, Samuel Sánchez, Valverde…) sirven para revitalizar este deporte en nuestro país, no está nada mal. Además, si en los momentos difíciles son ellos los que rivalizan porque ganan, muchísimo mejor. Pero, sin duda, todo lo que sea que los españoles ganen, significa que el ciclismo español toma aire.
En los últimos tiempos, han sonado bastantes rumores sobre un nuevo equipo de gran calado en torno a Alberto Contador. ¿Crees que eso podría ser una gran noticia a nivel mediático? ¿Darle a la gente un equipo de referencia, del mismo modo que en el fútbol tienen a Real Madrid o F.C. Barcelona?
Pienso que Alberto Contador es el mejor ciclista del mundo, eso no lo duda en este momento nadie. Todo lo que sea que Contador esté cómodo en un equipo que le permita ganar y obtener los triunfos que su calidad merece es bueno para él. Yo evidentemente no puedo opinar acerca de en qué estructura debe desarrollar su carrera deportiva Alberto Contador, nadie mejor que él debe saberlo. Ha demostrado ser el mejor en la carretera, y tiene que serlo también en los despachos a la hora de decidir su futuro. Lo único que digo es que la decisión que él tome será la mejor y, por tanto, habrá que apoyarla.
El hecho de que Antena 3 posea la Vuelta y no la emita, ¿es un contrasentido?
No, para nada. La Vuelta a España está muy cómoda en TVE, nosotros queremos seguir en TVE y de hecho vamos a hacerlo. Siempre que testamos las opciones de mercado, todo el mundo asocia a la Vuelta con TVE y viceversa. No es una cuestión de marca, es una cuestión de que todo el mundo pueda ver la Vuelta en abierto, el mayor número de horas y en la mayor franja de territorios posible. Ojalá la Vuelta pueda estar por muchos años en TVE.
¿Son rentables los viajes internacionales de la Vuelta desde el punto de vista del márketing?
Sí, desde todos los puntos de vista son rentables. La Vuelta hay que reinventarla cada año, proponer un recorrido distinto y novedoso. No digo que vayamos a seguir la pauta de salir cada año desde el extranjero, no va a ser así. Pero, desde luego, es un elemento de frescura que no sólo agradece el mundillo ciclista sino también los espectadores, que pueden ver algo diferente. Es muy importante para nosotros que Holanda quiera acoger la Vuelta a España, y de la misma manera en la Vuelta nos sentimos orgullosos de ser reclamados por un país de la tradición de Holanda
El viejo sueño de Enrique Franco de llevar la carrera a las Islas Canarias o las Baleares, ¿es posible en este momento?
Con los medios que hay, hoy en día todo es posible. Sin embargo, la Vuelta sólo puede ir a donde se la solicita porque son muchos los medios necesarios. En el momento en que Canarias o Baleares se interesen por tener una salida oficial, la Vuelta planificará para algún año poder hacerlo posible.
Por otra parte, ¿han pasado ya los tiempos de mirar a Portugal para planificar la carrera?
A la hora de realizar recorridos, desde luego que no. Para mirar equipos, este año no es el adecuado debido a la desaparición de Benfica. Todos los equipos están en nuestra órbita, pero a día de hoy sería engañarse pensar que una escuadra portuguesa pueda venir a la Vuelta’09. Eso no quiere decir que en próximos años sí se pueda dar el caso. Portugal es un país hermano de España, lo es para todo y también lo es en lo tocante al ciclismo.
Por último, tres preguntas en torno a polémicas recurrentes en los últimos años. ¿Crees que prescindir del pinganillo sería una solución para contrarrestar la ausencia de espectáculo que a veces tiene lugar en las carreras?
El pinganillo hay que eliminarlo, sólo hay que dejarlo como elemento de seguridad.
La relación entre las tres Grandes Vueltas y la UCI, ¿es ahora mismo cordial?
Es cordial, teníamos una situación de incomunicación que ha pasado a ser de total comunicación. De hecho, el próximo miércoles 3 de Junio tendremos una reunión la UCI, la Asociación de Equipos y la Asociación de Organizadores para seguir planificando el futuro, en especial de cara al calendario, que es lo que más nos preocupa ahora mismo a todos los organizadores.
Por último, ¿qué es preferible? ¿Un deporte con espectáculo o un deporte limpio?
Un deporte, por ser deporte, siempre será espectáculo. Y el espectáculo, cuanto más deporte, más limpio será.
Primera parte de «Tres preguntas sobre el Giro»
8 de Mayo, Arueda.com
Y, en realidad, por nivel deberían estar en el Giro 2009. Pueden aspirar a un top-10 en la general de la mano del polivalente ex Liberty Giampaolo Caruso; en las ‘volatas’ tienen a un Enrico Rossi en progresión que con su descaro les daría bastante presencia. Y el resto del equipo… variado y con posibilidad de éxito en fugas: el veterano escalador Massimiliano Gentili, el jovencísimo rodador Maurizio Biondo o el campeón de Italia Filippo Simeoni, que ha renunciado a su maillot de campeón nacional como acto de protesta por la no invitación del equipo… Mimbres suficientes para aspirar a alguna victoria parcial.
Xacobeo, por el contrario, ofrece menos a nivel competitivo después del varapalo que ha supuesto el accidente doméstico que deja fuera del ‘nueve’ al escalador Ezequiel Mosquera. David García Dapena queda así como cabeza visible del equipo, secundado por Gustavo César Veloso de cara a la general. Sin embargo, el mejor terreno para que los gallegos se dejen ver será el de las fugas, donde cuentan con los talentos rusos Eduard Vorganov y Vladimir Isachev, el combativo vasco Iban Mayoz y el jovencísimo superclase madrileño Marcos García.
A priori, Flaminia parece un equipo más apropiado para el Giro. Tiene mejor plantilla, al menos para lo que a esta carrera respecta y, encima, es italiano. Pero es de suponer que el empeño de RCS que llevó a contar a la empresa a invitar a los hombres de Álvaro Pino (tener una escuadra netamente española en el Giro) persiste, y eso sí que es una garantía por muchas quejas que haya.