Ha habido durante las últimas horas una corriente de indignación general dentro del tuiterío ciclista por la execrable entrega del videoblog ‘El punto sobre la I’ que el director de Marca Eduardo Inda ha dedicado a lo que él denomina ‘Caso Contador’. El título de la misma es “Las diez preguntas que áun no se han contestado del ‘caso Contador’«; el contenido, lamentable, consiste en el inenarrable Inda enumerando lo que él considera las principales incógnitas no desveladas en este ‘affaire’ de dopaje.
Más allá de la opinión que me merece el personaje (quiero pensar que no es así la persona) de Eduardo Inda, que volqué en mi Twitter y prefiero no repetir, lo cierto es que el periodista pamplonés demuestra en primer lugar una arrogante irrespetuosidad y, en segundo, una notoria falta de conocimiento del tema en cuestión, del ciclismo en general y del ‘caso Contador’ en particular. Como veremos a continuación, la mayoría de lo que para él son incógnitas tienen en realidad una fácil respuesta.
Las “preguntas sin respuesta” de Inda
1. ¿Por qué aún no nos han dicho cuál es la carnicería en la que supuestamente se compró el solomillo maldito? Si no tienen nada que esconder, ¿por qué ocultan el nombre?
El problema no es la carnicería. El nombre de la misma probablemente se sepa desde el minuto uno gracias a la factura que emitió el comercio en cuestión pero… ¿qué se ganaría denostando públicamente a un negocio local por vender una carne que sencillamente les ha llegado contaminada? En todo caso, lo interesante sería saber el nombre del ganadero que en teoría ha engordado con clembuterol a sus reses…
Poniéndonos mordaces, habría que decirle a Inda que quien se sienta agraviado por la información que aparece en su periódico no debería denunciar al kioskero, sino a… en fin.
2. ¿Padece López Cerrón demencia senil? Lo digo porque de momento no recuerda dónde adquirió la carne
Hace un mes, estuve en la Vuelta a España. La noche de la crono de Sevilla, tras hacer mi trabajo, salí con mi compañero de fatigas a tomar unas copas. Me resulta imposible recordar cómo se llamaba el local donde estuvimos, y no tengo demencia senil ni acabé borracho aquella noche. Comprendo que López Cerrón, que jamás había estado en Irún y tuvo que buscar la carnicería vía GPS, tampoco fuera capaz de decir el nombre del comercio en cuestión a bote pronto. Es complicado rememorar el lugar en el cual entraste una vez en tu vida en una localidad donde no habías pasado demasiado tiempo antes.
Parece mentira que esta pregunta se formule así, de una manera tan chabacana y directamente irrespetuosa.
3. ¿Qué pinta en todo este invento un López Cerrón que no es nada ni nadie en el Astaná?
El ciclismo es una familia, y Eduardo Inda no pertenece a ella. Por ello se entiende que no conozca a José Luis López Cerrón, un señor respetadísimo en el mundillo por su condición de ex ciclista y organizador de la Vuelta a Castilla y León. José Luis mantiene también una relación cercana con muchos medios y corredores como Alberto Contador. Además es un enamorado del deporte que aquel día se acercó a ver pasar el Tour de Francia y aprovechó para hacer un favor personal a una persona a quien le vincula una amistad.
4. ¿Por qué sólo parte del equipo, los españoles cercanos a Contador, sí ingierieron el solomillo, y sus íntimos enemigos de Astaná, Vinokourov y compañía, no lo hicieron?
Esta “pregunta sin responder” la resolvió el propio Contador durante la rueda de prensa. Vinokourov, Grivko, Ilgynskyi y Jesús Hernández cenaron antes; el resto del equipo lo hizo más tarde. Los ciclistas citados tomaron lo que les sirvió el hotel; los otros, lo que trajo López Cerrón, que llegó en esos momentos.
5. ¿Por qué Paco Olalla, cocinero del súper equipo kazajo, jura y perjura que el siempre selecciona las viandas personalmente y ahora resulta que un extraño, López Cerrón, es el que dedica a hacer la cesta de la compra?
En primer lugar, jurar y perjurar son antónimos. Vale que es una frase hecha, pero también es una patada al diccionario impropia de quien se presume un ‘top gun’ del periodismo.
López Cerrón no es un extraño; cuando Alberto Contador recibió el ofrecimiento de llevarle a Francia “lo que necesitara”, consultó a Olalla y le pidió la carne que finalmente trajo.
6. ¿Por qué el crack español se alimentó de proteínas, es decir carne, y no de hidratos de carbono, o sea pasta, en la víspera de la subida al Tourmalet?
También lo explicó Contador en la rueda de prensa. No es algo habitual, pero López Cerrón se tomó la molestia de traer la carne y lo de menos que podía hacer el madrileño era comerla. Además, en los días de descanso se suelen dar más libertad a los ciclistas a la hora de alimentarse con objeto de aliviarles un poco la tensión psicológica. Quedaban dos días para el Tourmalet y quizá prefirieran evitar el hastío de los ciclistas antes que preservar el orden alimentario.
7. ¿Por qué la UCI tapó el positivo? ¿Para no matar definitivamente a un ciclismo cuya credibilidad se encuentra bajo cero?
Estos “positivos” que se antojan no intencionados, por puntuales o nimios, suelen pasarse por alto. La UCI se comunica con el ciclista, llegan a un acuerdo como de hecho iba a hacerse en este ‘caso Contador’ antes de que apareciera la filtración, y aquí paz y después gloria. Es un pequeño chanchullo, quizá ilegal desde un punto de vista estricto, pero habitual y bien visto por la mayoría de estamentos del ciclismo.
8. ¿Es normal contar en la sangre con ocho veces más de plástico de lo que verdaderamente se considera dopaje?
No hay aún ninguna directiva mundial antidopaje en torno a la cantidad de plástico en sangre que es dopaje. Lo que se encontró en la sangre de Contador según las filtraciones fue una cantidad de plástico ocho veces superior a lo normal. Si esto constituye o no dopaje se decidirá apenas se homologue el método de detección, aún en pruebas. Lo innegable es que este dato sí que pone en duda la credibilidad de Contador.
9. ¿Por qué de repente a nuestro súper deportista parece como si se lo hubiera tragado la tierra?
Contador ha pasado una semana de gira por todos los medios de comunicación españoles para explicar su “positivo”. Es lógico que ahora pase un par de días más escondido, a pesar de que esta misma mañana ha actualizado su Twitter con un mensaje de “decepción”. Eso sí, salir al paso de rumores y filtraciones no es algo que se estile demasiado en el deporte y esto del plástico es de momento sólo eso: un rumor, una filtración.
10. ¿Por qué las autoridades sanitarias vascas y españolas no han iniciado una cacería tras las gravísimas acusaciones del pinteño? Si hay clembuterol circulando por ahí en la carne tenemos un problema muy serio, esta sustancia provoca dolencias cardíacas.
A esta pregunta no tengo respuesta, no sé si se han tomado medidas o no y la verdad es que sería interesante saberlo. Por otro lado, discrepo con el alarmismo de Inda; hay que consumir mucho clembuterol para resultar intoxicado…
Nota final
En mi opinión, Eduardo Inda se ha equivocado de medio a medio en su videoblog de hoy. Ha pretendido sentar cátedra en un tema que no conoce y su credibilidad ha salido muy mal parada, aún peor que la del ciclismo. No se puede estar tan desinformado siendo director del diario más vendido de España.
Por otro lado, sí es cierto que hay muchas preguntas sin responder en el ‘caso Contador’. Muchas de ellas las podéis encontrar en este artículo de la web de Bicycling